My alpha

Chispa

Antes que nada quiero agradecerles a todas las personitas que se tomaron su tiempo para avisar en mí otra cuenta que la historia se mudó para acá. En verdad gracias.

Otra cosa, debido a las trabas que me puse a mí misma mientras escribía sin un rumbo fijo (sigo sin saber a dónde va esto), este no será un omegaverse convencional, aunque pienso que ya se habrán percatado de eso, obviamente explicare las diferencias dejando notas o explicando brevemente en la misma historia.

Capitulo cortito.

•••

Este es el centro comercial más cercano, vengo a reabastecerme cada fin de semana. ¡Oh! en aquel parque se hacen actividades recreativas los fines de semana. Por allá está el hospital al que voy de vez en cuando a visitar a los niños y también es donde me atienden. Allá esta la casa de retiro a la que también voy con regularidad.

El omega siguió y siguió, le explicó las calles importantes, le dijo los atajos que podrían tomar si se les hacía tarde, le mostró lugares para entretenerse, lugares para conseguir comida rápida rica, le indicó donde estaban las estaciones de policía, estación de bomberos y demás cosas, sin embargo, pese al entusiasmo y la energía amistosa del omega, el alfa se mantuvo en un rictus de fastidio absoluto todo el camino. Aunque ciertamente eso no apagó el entusiasmo del más bajito.

Izuku solo se detuvo cuando estuvieron frente a su edificio―Aquí es, elegí este departamento porque está un una ubicación muy conveniente, además el área es bonita ¿Qué opinas?

Katsuki ladeó su cabeza para verlo, frunció una de sus cejas y la otra la curvo, luego se llevó la mano a la oreja, segundos después Izuku miró indignado como el alfa se sacaba los audífonos que habían estado bien camuflados bajo la sudadera naranja.

―¿Que tanto parloteas, Deku?―

El omega frunció el ceño, ¿era en serio? ¡Se la había pasado gastando saliva todo el camino en vano!

―¿Kacchan, te serví de guía de turistas para nada?―preguntó el omega, a lo que el alfa simplemente lo ignoró y miró sus alrededores.

―¿Aquí vives?―preguntó apuntando al edificio.

―Sí, aquí es―respondió resentido.

El lugar no era nuevo pero lucía bastante decente, por lo menos la fachada lucía bien, estaba cubierto de una capa limpia de pintura blanca, parecía tener buena iluminación y la construcción lucía firme. Suficiente para él.

―¿Y qué estamos esperando, acaso perdiste tus llaves? No me extrañaría―

―¡Yo no perdí nada!―Contestó con el ceño fruncido y los cachetes inflados, "ridículamente infantil " pesó Katsuki, el omega era exageradamente expresivo.

Katsuki siguió al malhumorado omega hasta su vivienda.

El lugar estaba limpio y era pequeño, apenas para que dos personas habitaran con la cómodamente, las paredes estaba pintadas de un suave color beige, había fotografías colgando de las paredes y pululaba una ausencia de olor absoluto, como si el lugar fuese habitado por un beta.

―¿Cuál es mi habitación?―le pregunto secamente.

―Por acá―le contestó adentrándose a un amplio pasillo―mi habitación está en el fondo, la tuya es la de la izquierda y la puerta que está frente a ella es el baño.

Con esa información, el alfa caminó hacia su nueva habitación, el omega lo siguió de cerca, quería mostrarle el cuarto a detalle y luego mostrarle el resto de su hogar.