3.

21.9K 2.2K 1.1K
                                    

BIG IN JAPAN

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

BIG IN JAPAN

"Esta noche, esperaré aquí a mi hombre"
_______________

" - Estás preciosa.

Sonreí ante sus palabras cual niña pequeña, ruborizándome, tiñendo mis mejillas de un leve tono rosado que acentuó todavía más mis facciones.

- Tú sí que estás guapo.

Con una sonrisa sincera y dulce solté esas cuatro palabras, acortando la distancia entre los dos mediante un par de pasos.

Por inercia llevé mis manos hasta su corbata granate, retocándola para después pasar ambas manos sobre las solapas de su chaqueta de traje, como si ese simple hecho las planchara.

Me correspondió con la misma sonrisa, justo antes de dejar un pequeño beso sobre la punta de mi nariz. Ante ese gesto tan dulce, no pude hacer nada más que rodear sus hombros con mis brazos a la espera de que él hiciera lo mismo con mi espalda y así fue.

Cerré los ojos ante la gran ola de calma que colisionó con mi cuerpo en aquel instante. Su mano izquierda permanecía aferrada a mi espalda baja mientras que con la otra recorría el largo de mi cabello, ese que sin ningún tipo de atadura ni recogido, llegaba hasta mi cintura.

Podría haber vivido aquel momento para siempre, pero cuando volví a abrir los ojos, le vi parado tras nosotros, observándonos y escudriñándonos con la mirada como siempre hacia antes de adoptar una expresión de desprecio e ira.

Me sobresalté al verle, lo que provocó que me separara de él en el acto. Entonces todo se tornó de golpe, un nuevo escenario apareció ante mis ojos: nuestro primer juego.

- ¡Yuna! - sus palabras, su voz, resonaban en mi cabeza con tanta fuerza y culpa que se sentían como puras llamas quemando mi cabeza por dentro. Mi respiración comenzó a acelerarse, azotando mi cuerpo, comprimiendo y dilatando mis pulmones con demasiada fuerza y rapidez. - ¡No me dejes, joder! ¡No me dejes!"

- ¡No! - grité tanto en mis propios sueños que incluso llegué a despertarme de golpe, haciendo que mi cuerpo se incorporara casi al instante.

Mis ojos se abrieron como platos. Un sudor frío yacía pegado por mi pecho y a lo largo de mi columna vertebral. Un estado de nerviosismo absoluto había poseído mi cuerpo, agitándolo mediante pequeños temblores que tampoco podía controlar.

Al ver que me encontraba en una habitación desconocida, ante el miedo de estar donde yo creía, mi estado no hizo más que empeorar y cuando percibí que alguien me estaba sujetando por los hombros, evitando que me moviera, comencé a moverme más, pero no a causa del descontrol que llevaba mi cuerpo, sino por culpa de mi más puro instinto, gritándome a los cuatro vientos que me librara de aquel agarre involuntario que no hacía nada más que contener los espasmos que recibía mi cuerpo.

DAMA DE PICAS; ChishiyaWhere stories live. Discover now