El mal viaje

3 0 0
                                    


Ese día quede de ver a mi amigo a mi amigo alrededor de las 12:30, consumiríamos el cartón (Yo el medio de unos 150ug que me quedaba y el otro medio que tenia no se de que potencia). Luego de eso iríamos a hacer un encargo que el debía realizar, y finalmente iríamos caminando a un spot en una montaña que el conocía, así que básicamente eso paso al pie de la letra, el vino a mi casa, aquí consumimos el LSD, fumamos algo de cannabis al mismo tiempo y luego nos fuimos, desde luego empecé a sentir los efectos de la marihuana casi de inmediato, y haciendo el calculo deduje que una vez empezaran a bajar tendrían que empezar a surgir los del LSD, ya que los tiempos coincidían.

Tardamos alrededor de 1 hora en ir a hacer el encargo y como lo imagine empezaron a desaparecer los efectos del cannabis y a aparecer los del acido de forma casi sincronizada, esta vez estaba en plena subida de un acido y relativamente lejos de mi casa, pero me sentía tranquilo pues íbamos con otros 2 colegas que no habían consumido LSD, y que querían ir a la montaña con nosotros y fumar algo de hierba, así que caminamos a casa de mi amigo y nos preparamos bien para la caminata, cosa que mas tarde prácticamente me seria de enorme ayuda, pero a eso llegaremos luego, ya habían pasado alrededor de 2 horas de haber comido el cartón y tanto el como yo empezábamos a notar mucho los efectos, íbamos como en una montaña rusa, bajábamos y subíamos y nos empezaba a costar hablar aunque seguíamos bastante lucidos, cabe recordar que yo estaba consumiendo una dosis el doble de fuerte que mis únicas y ultimas dos experiencias, pero aun así no me sentía mal en absoluto, de hecho estaba mas enfocado en mi amigo, lo miraba y analizaba su comportamiento y me resultaba curioso que a pesar de estar bajo el efecto de un psicodélico desde mi perspectiva salvo una leve pero evidente sonrisa se miraba totalmente normal.

Debíamos caminar bastante, llevábamos galletas, dulces y agua con nosotros, yo estaba ya en ese mundo de colores y con esa sensación de tercera persona a la que en ese punto ya me había habituado, y si bien se suponía que tendría que empezar el peak justo en nuestra caminata y llegar al spot justo en su punto máximo, no me sentía tan desinhibido pero tampoco tan maravillado como en mi pasada experiencia, quizá porque a pesar de doblar la dosis ya tenia algo de tolerancia en mi cuerpo o porque esa mitad del cartón se había degradado un poco, ¿quién sabe?.

El caso es que llegamos al spot, una cima de una colina cercana al lugar donde vivo, el cual de hecho esta rodeado de montañas, granjas y naturaleza. Desde ahí tenia una vista hermosa de una pendiente con animales al fondo y muchos arboles a lo lejos que en ese estado casi parecía que los estaba viendo a través de un telescopio, pero en ese momento mi amigo saco su vaporizador con un cartucho de THC bastante potente, todos empezaron a fumar de el y ya que no me sentía tan tripeado yo tampoco dude en hacerlo, no recuerdo ni estoy muy seguro de cuantos hits se dio mi amigo que también estaba tripeado, pero estoy bastante seguro de que fueron muchos menos que yo, ¡siendo que el fumo unas 2 o 3 veces y yo al menos 10!, quizá eso se deba a que yo para eso entonces solía fumar demasiada marihuana y las dosis normales ya no me hacían efecto. Pero esto era un vaporizador y evidentemente me había excedido.

Nos quedamos en el spot una media hora, mientras el efecto del THC surgía iba potenciando al LSD, y yo me sentía tranquilo, estaba sentado después de todo y hasta ese momento no sentía nada que no hubiese sentido antes, si que venia ondulaciones en el cielo y en todo a mi alrededor y muchos colores, pero nada que no pudiera controlar.

Pero fue entonces cuando decidieron irse, y tuve que levantarme y recordar que tenia que caminar todo de regreso, claro que se lo que deben estar pensando y lógicamente en ese momento la peor idea era esa, pero los amigos que no se habían tripeado tenían cosas que hacer y debían irse, y yo no sabia eso hasta ese entonces, por ese motivo también había fumado tanto, pensaba que nos íbamos a quedar mucho mas rato, pero no fue así.

De algún modo saltamos un muro para salir del spot, llegamos al camino por el que veníamos y empezamos a caminar, pero en cuestión de un par de minutos empecé a sentir cosas que ya no estaba seguro si podía controlar.

Quizá el caminar e hiperventilarme y el hecho de que llevaba un abrigo bastante grueso por el frio influyo, pero comencé a ver a mi alrededor como todo lo que se movía dejaba un rastro de imágenes residuales muy vividas, esto ya lo había percibido antes en forma mucho mas suave, pero esta vez era como si la realidad ante mis ojos se tratase de una baraja de naipes que alguien peinaba, o como un "comic book" siendo desplegado y cada decima de segundo una nueva imagen se posaba sobre mis ojos, esto aunque no me mareo me resulto abrumador y empecé a decirme que algo andaba mal, de pronto miraba al suelo tratando de enfocar mi vista y no prestar atención a esa sensación tan fuerte y fea, y de mantenerme caminando centrado, pero las pequeñas piedras y grietas del suelo se empezaban a convertir en estrellas y la tierra a su alrededor se oscurecía y de pronto parecía como si estuviese viendo un cielo nocturno, un segundo después estaba mirando al cielo real y ya no sabia si estaba mirando el cielo o la tierra, eso me confundió mucho y en ese momento tuve que decirle a mis amigos que esperaran, que me dieran algo de tiempo, que no podía caminar mas.

Comprensivos aunque un poco de mala gana pues se veía que llevaban prisa me dieron chance de sentarme en una orilla del camino, yo intentaba recuperarme pero todo no hizo mas que empeorar, en ese momento el pánico me empezó a dominar y surgió en mi por primera vez la sensación mas horrible que jamás había sentido y que empezaría con toda esta osadía mental que padezco hasta el día de hoy.

Una cosa es sentir esa irrealidad clásica del LSD como si estuvieras en tercera persona, pero esto era muy diferente, era como si hubieran anestesiado mi cuerpo, como si me estuviera paralizando, empecé a temblar y a sentirme muy frio, y de pronto me costaba muchísimo respirar, básicamente era un severo ataque de pánico, pero a eso le acompañaba una increíblemente abrumadora, fea e incomoda sensación de perder la sensación de mi propio cuerpo, como si mi torso y extremidades se hubiesen tornado de palo o de plástico, siendo que me tocaba a mi mismo y no me percibía, no sabia si estaba inhalando o exhalando, por lo que solo respirar se volvía muy difícil y confuso, y todo esto no me causaba nauseas ni dolor, simplemente un miedo mas intenso del que nunca en mi vida había experimentado.
Definitivamente ya no quería sentirme así. Era la Despersonalización.

Cuando me di cuenta estaba postrado en el suelo del camino, donde pasaban personas acostado como una piedra sin poder apenas moverme, alucinando, sin sentir ni un centímetro de mi mismo y en completo pánico, y con mis amigos avergonzados a unos 15 metros tratando de pensar que hacer conmigo. Incluso el otro que también estaba bajo el efecto del LSD se había alejado.

Yo me percate de eso, no recuerdo cuanto tiempo estuve ahí, no debieron ser mas de 5 minutos, pero aunque no quería moverme ni un poco de alguna forma conseguí sacar fuerza de voluntad para levantarme todo sucio y polvoriento y seguir caminando, al menos ya no estaba alucinando tan fuerte, mi vista se había centrado un poco y me trataba de recordar a mi mismo todo lo que había leído y aprendido sobre substancias,  convenciéndome de que era solo una muerte del ego o un efecto normal, y que dentro de un rato estaría mejor, lo cierto es que si bien el efecto es normal, estaba padeciendo una hipoxia sin darme cuenta, por la dificultad de respirar, el abrigo grueso y apretado y la caminata, y en ese estado no me percataba de eso, solo hacia lo posible por respirar y seguir caminando, pero tenia la sensación de que me iba a desmayar en cualquier momento y un par de veces estuve a punto de colapsar, sentí como si me golpearan desde dentro de la cabeza y una sensación metálica como de sangre en la misma.

Pero con todo eso logre empezar a caminar un poco, los colegas con los que andaba me dieron agua y dulces y eso me ayudo aunque me era tremendamente difícil beber o comer, sentía como si el agua simplemente me atravesara, como si mi cuerpo fuera inmaterial o como si fuera simplemente un fantasma y hubiese perdido mi sentido del tacto.

Pero poco a poco me iba acercando mas a mi casa, no quería llegar así pues mi madre estaba en casa y a pesar de que ella sabia que yo era consumidor no me gustaba la idea de que me viese en ese estado, así que antes de volver a casa fui a uno de los parques infantiles cercanos y solo me acosté en el pasto, me quite el suéter y hasta ese momento pude finalmente empezar a sentirme mejor, mire al cielo y empecé a ver fractales en las nubes pero ahora ya estaba mucho mas tranquilo.

Lo cierto es que solo tardamos una media hora en bajar desde el spot, pero fue sin duda una de las peores medias horas de mi vida, y ahora que finalmente podía respirar y estaba algo mejor me sentía psicológicamente muy cansado y aun restaban algunas horas de bajada del LSD así que solo quería ir a mi casa y estar en paz, por lo que deje a mis amigos y me fui solo, llegue a mi casa, entre y por fortuna mi madre estaba en su cuarto a puerta cerrada por lo que no me vio llegar todo sucio, una vez llegue a mi cuarto y me pude acostar me sentí un millón de veces mejor, y aunque aun me sentía tripeado estaba bien, ya no sentía nada malo, y de hecho pude hasta disfrutar el resto del viaje escuchando música, comiendo y charlando con mi madre, como si nada hubiera pasado.

En ese momento no lo había entendido pero luego entendí que el mal viaje duro prácticamente lo que duro el efecto de la marihuana, y que una vez se paso aunque aun me sentía bajo el LSD no me sentía mal en lo absoluto,  y así fue como días después entendí que no fue el acido lo que me provoco ese mal viaje si no la marihuana.

Luego de eso desde luego no consumí nada mas en unos días, y me quede con esa intriga de que rayos había sucedido, pero lo atribuí a simplemente un exceso, lo analice y llegue a la conclusión de que la combinación de la caminata, el inoportuno tiempo en que tuvo que hacerla, el exceso de marihuana y el pánico fueron lo que me ocasionaron esa sensación tan espantosa.

Para muchos una experiencia de este tipo hubiera sido suficiente para dejar de consumir drogas, pero como yo había leído tanto y aun me picaba esa curiosidad por conocer esa parte de la existencia sabia que tarde o temprano continuaría con mi camino y no permitiría que ese mal viaje me impidiese llegar mas lejos o seguir explorando mi mente.

Pero luego de eso empezaron a ocurrir cosas que no me esperaba, y pronto me daría cuenta que aun con toda la confianza y lo que había leído, había entrado en un nuevo mundo y empezado a rondar terrenos muy peligrosos.




You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jan 01, 2021 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Creo que rompí mi cerebroWhere stories live. Discover now