•To have and to hold• [EDITANDO]

Capítulo 31: No uses malas palabras para lastimar a otros.

El muerto se veía muy tranquilo, dispuesto de manera adecuada y respetuosa para la cremación. Podría haber estado dormido, solo un pequeño hematoma en la sien reveló la forma de su muerte, y sus labios aún se curvaron en una leve sonrisa.

Incluso los asesinos sin alma debían ser enviados correctamente a la otra vida, y Lan Xichen ciertamente no quería que este merodeara por Cloud Recesses como un fantasma enojado. Aun así, una punzada de simpatía inapropiada se elevó en su corazón, el chico parecía tener catorce años.

Wangji había dicho que se llamaba Xue Yang.

Xue Yang, ya responsable del asesinato de todo un clan cultivador, Xue Yang, que ya debería haberse enfrentado a la justicia en los Reinos Impuros, que había escapado para llegar hasta aquí, para atacar a Wei Wuxian.

Lan Xichen negó con la cabeza y suspiró. Se preguntó qué pudo haber pasado en la vida de este niño para que eligiera un camino tan malvado.

Imagina poder sonreír, con el corazón lleno de oscuridad y malicia, fue incomprensible.

Se armó de valor, no le agradaba la idea de registrar el cadáver, pero tenía que hacerlo.

Xue Yang no había llevado mucho consigo a los Recesos de las Nubes. Su bolsa de quiankun contenía una espada, varias dagas y cuchillos arrojadizos, trozos de cuerda dentro de una bolsa de tela, trozos de tela, un pequeño garrote y un pequeño trozo de papel.

Por el olor, dulces de limón.

Metido en su cinturón estaba la ficha de jade que le había permitido romper las barreras, y un cuadrado de papel doblado.

No, dos hojas de papel de diferentes colores y gramajes, dobladas.

Dos sellos rotos diferentes, dos colores diferentes de cera.

Lan Qiren tocó la ficha de jade con veneno.

—Su She.—escupió.

—Eso me temo.—dijo Lan Xichen pesadamente.

—Estoy muy, muy decepcionado de él.

Lan Qiren resopló y cruzó los brazos sobre su cuerpo.

—¡Ya no es un discípulo de la secta Lan!

—Habló por los Wen, en la reunión del Reino Impuro.—dijo Lan WangJi.

—Son bienvenidos por él.—dijo Lan Qiren con desdén.

—De todos modos, todos son sordos.

—Tío.—dijo Lan Xichen, débilmente con reprobación.

—¿Puedo?—preguntó Wei Wuxian y se inclinó sobre la mesa para tocar con dos dedos las hojas de papel dobladas, miró a Lan Xichen en busca de permiso.

La sonrisa de Lan Xichen fue triste, inclinó la cabeza.

Wei Wuxian acercó los papeles a él, Lan Xichen vio el momento en que se le ocurrió que no podía desplegarlos y aplanarlos con una mano.

Jiang Yanli hizo un movimiento instintivo para estirar la mano y luego apretó las manos, Jiang Fengmian frunció el ceño.

Wei Wuxian le pasó las hojas de papel a Lan Wangji con un pequeño suspiro.

—Puedes ser mi secretario, Lan Zhan.—dijo.

Lan Zhan separó las sábanas y las colocó sobre la mesa frente a Wei Wuxian. Movió la ficha de jade de Su She para que actuara como un pisapapeles, luego se sentó.

Wei Wuxian los miró a su vez.

—Tinta negra sobre papel gris, gramaje, casi rígido. ¿Un ligero olor a... humo, quizás? Dos palabras. "Eliminar Wei". Bueno, eso es especifico.