CUATRO

515 102 10
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La oscuridad se fue, puedo visualizar un bosque

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La oscuridad se fue, puedo visualizar un bosque.

—Disculpe el lugar, no se me ocurrió otro, su alteza.

El demonio soltó mí mano y me tendió una taza de café junto a un abrigo. Dudé en aceptar pero con el frío abundante no me negué.

—Gracias por salvarme —Dije al sentarme en una roca grande.

—Su alteza real, es un honor que sea nuestra princesa, pero déjeme decirle que se cuide del amo príncipe —Dijo la voz de una chica, ella apareció a lado de quien me salvó—. Soy Dahaka, y el mal educado que está a mí lado se llama Dahako. Un honor, su alteza.

Realizó una reverencia. Les sonreí apenada.

—Nosotros somos ángeles que dentro de poco se convertirán en demonios, todo por tener relaciones sexuales con humanos —La chica se sentó en frente de mí—. Por otro lado, en el celestial, el amo Sam se conoce como el peor y más peligroso demonio, es un lujurioso y mentiroso, ha destruido varios países, hace que las personas tengan conflictos y hechiza a sus víctimas para tener pactos, como usted por ejemplo —Contó.

Fruncí el ceño.

—¿Por qué yo?

Ambos se miraron como sí lo que dije fue una broma, dahaka suspiró pesado.

—Podría estar a tiempo de estar a salvo, si se cuida. Ha sido hechizada para que aceptara el pacto, la meta del príncipe es tener la corona del inframundo por eso el rey a luchado contra su hijo, trató de impedir la unión de sangre pero llegó tarde, le queda como opción tener al príncipe encerrado.

Miré hacia otro lado, no puedo creer esto.

—¿Sabía usted, su alteza? La unión se hace cuando la familia del príncipe y la futura princesa están de acuerdo. En el momento que usted acepta la sangre de su amado, comparte su pecado y él obtiene su pureza.

Negué con la cabeza. Dahako le dio un vaso a su hermana, ella hechó unas hierbas y por último le agregó su sangre que era blanca o dorada, no puedo distinguir por el brillo.

Nuestro pacto (terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora