Noah

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Decir que Noah mejoró es mentir.

Se cerro así mismo nuevamente y la comunicación se rompió. No quería salir de su cuarto y todo lo planeado en mi mente como salir al cine, a pasear y disfrutar la vida quedo en el olvido ya que solo lograr que baje conmigo al patio era un reto.

No hablaba y fue cien veces peor a que me insultara o dijera cosas como al principio,  porque esta vez su dolor atravesaba mi cuerpo cada vez que estaba con él.

Solo vi a su padre una vez más luego de esa ocasión y fue porque Rebeka llegaría más tarde de su trabajo. Noah seguía enojado con su padre, pero él ya pareció olvidarse del tema porque oí como le invitaba a comer pizza y ver televisión junto; Noah lo ignoró y se fue a su cuarto. Al día siguiente seguía igual que siempre, pero no iba a permitir que se quede en la cama todo el día así que lo obligue a salir a sentarse conmigo en el patio.

-¿Cómo te fue con tu psicóloga? -le pregunté intentando sacar conversación.

-Normal.

Asentí. Verdaderamente él no ayudaba mucho.

-Tu doctor vendrá hoy también.

-Lo sé.

-Pensé que ya había venido esta semana -dije curiosa. No era común que aparezca dos veces en un corto tiempo - tu madre estaba apurada esta mañana y no me dijo muy bien a que venía.

- Me va a sacar sangre.

-¿Cómo un chequeo de rutina?.

-Cómo un chequeo de que no me esté drogado.

Abrí mis ojos sorprendida. Sabia que a las personas en rehabilitación tendían a hacerse estudios para comprobar que no lo sigan consumiendo y estén cumpliendo el proceso de recuperación pero me sorprendió que él lo haga. Estaba vigilado las 24 horas del día y no salía de su casa, aunque eso no impidió emborracharse antes, pero viéndolo ahora apenas podía levantarse de la cama. No creía que hiciera falta el examen, Noah estaba más sobrio que nunca y al parecer era eso lo que aumentaba su depresión. El ver el mundo con claridad y tener conciencia de sus acciones le estaba matando, su actitud no era solo porque extrañaba a su hermana, era porque por primera vez en su vida estaba tan lucido que no sabia que hacer con esa situación.

A las 5 de la tarde vino el enfermero en vez del doctor. Noah no impuso resistencia a la prueba, estuve con él en todo el momento.

-¿Cuando va a estar el resultado?- pregunte cuando terminaron y Noah ya se había levantado harto de la situación.

-Dentro de dos días. Se lo avisare a su madre.

-¿También buscaran si esta anémico y todo eso?. Es que lo veo muy blanco y flaco.

Vi como Noah puso los ojos en blanco al escucharme pero lo ignore ya escuchaba su voz luego "pareces una madre".

-Si también. Por eso le saque dos tubos, haremos un análisis completo.

-Que bien.

Realmente quería saber si se encontraba saludable porque el hecho de que no comiera me ponía nerviosa. Incluso estuve apunto de preguntarle si podían darle algún vitamina para reforzar sus defensas cuando el enfermero me interrumpió.

-¿Harás algo hoy?.

-¿Que?.

-Quiero decir, luego. Cuando salgas de trabajar o otro día - comenzó a balbucear nervioso - el fin de semana. Solo si quieres claro.