Capítulo 30

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Me coloque enfrente de él, era difícil para mí tener que recordar algo que quizá para él no significó nada. Pero tenía que hacerlo por más que me doliera. Me miraba sin entender, el arma la tenía en su mano dispuesta a disparar a quien se le cruzará en su camino.

—Wanda... La pequeña gemela ingenua—Dijo, sus palabras me hubieran afectado si tan solo me importará en ese momento lo que pensará sobre mi.

—Papá... El grandísimo idiota de la familia—Dije enganchando mi sonrisa de victoria, su mirada siguió de la misma manera pero con más odio que antes.

—¿Acaso quieres ser la primera en morir de tu equipo?— Preguntó burlón, negué con la cabeza aún con mi sonrisa

—Vengo a decirte algo o más bien a recordarte algo, espero no estar interrumpiendo nada importante de lo que tengas que hacer, pero solo serán unos pequeños minutos
— Su mirada ahora era de confusión

Él pensaba que yo hablaría pero en vez de eso, entre en su mente para recordarle todos esos momentos, no solo conmigo también con Pietro y Lorna. Por más que yo hubiera querido controlaría a Magneto con mi mente pero es más difícil con él que con las demás personas del mundo exterior.

Los recuerdos de las cenas familiares empezaron a transmitirse en su cabeza, las fiestas navideñas, fiestas de halloween, fiestas de año nuevo, fiestas de cumpleaños, todos esos festejos pasaban por su cabeza con lentitud. Notaba como su cara se iba relajando, ya no estaba molesto, no parecía preocupado por algo, no estaba consciente del mundo real, su mente estaba concentrada en esos recuerdos. Recuerdos que en parte eran reales y otros habían sido alterados gracias a mí poder.

Su mano derecha tenía el arma me fui acercando poco a poco hasta poder quitársela. Los recuerdos seguían pasando en su cabeza, ahora eran los recuerdos de Lorna, de esa hija que había tenido cuando aún estaba casado con mi mamá. No culpo a nadie por ello, incluso ahora estoy feliz de tener otra hermana, pero siento que antes eso me llegó a afectar más y ¿Cómo no? Apenas era una niña que había visto "morir" a sus dos padres en esa explosión.

Llegué a su mano y le quite el arma, Magneto no sintió cuando lo hice, como dije estaba demasiado concentrado en esos recuerdos. Me fui de allí con la arma en mi mano, tenía que llevarla con Tony, él haría el siguiente paso del plan acordado.

—Aqui tienes— Dije entregándole esa arma, él la agarro sin dejar de mirar a Magneto que estaba ido.

—¿Que le sucede?— Preguntó.

—Esta viviendo nuevamente esos momentos con lo que antes, fue su familia— Explique sin dar más detalles sobre el tema.

Tony colocó el arma encima de una de sus armaduras, más en específico, el arma de uno de sus brazos. Los chicos llegaron con nosotros y poco a poco nos fuimos alejando, deje de pasarle esos recuerdos a Magneto cuando ya no pude controlar el dolor de mis heridas por exceso de poder. Él al darse cuenta que no tenía su arma se volvió como loco y la busco hasta que se dió cuenta que nosotros ya la teníamos.

Iba a quitarla pero una barrera lo detuvo, la barrera que todos habíamos creado lo estaba deteniendo. Tony nos dió la señal para que la barrera se fuera, así lo hicimos.

Magneto fue a toda prisa para recuperar esa arma pero cuando una de sus manos tocó el arma, comenzó el verdadero plan.

Todos creamos nuestra fuente de poder, todos sacamos el poder que teníamos, dimos la mayoría de nuestra fuerza para lanzarla justo en donde él estaba junto con esa arma. Lorna saco su poder verde, Pietro y Gwen creaban sus círculos de velocidad para lanzar rayos con más intensidad, Mary Jane, Harry y Norman con sus bombas. Electro con su poder de electricidad, todos sacamos esas habilidades que teníamos y que nos hacía especiales en diferentes sentidos.

Magneto se estremecía del dolor en su lugar, por más que intentaba irse de allí no podía gracias a la fuerza de nuestras habilidades. Las manchas en mis brazos iban creciendo y yo también empecé a gritar del dolor que estás me causaban, no me gustaba dejar en claro que me dolían, pero ahora era casi imposible no hacerlo.

—Adiós Papá—Dijimos mis hermanos y yo al mismo tiempo antes de que el desapareciera por el poder máximo que creamos.

Ya no había nada, ninguna arma, ninguna persona. Solo había quedado su traje en el suelo, me dolía el saber que ahora era un adiós para siempre pero era lo mejor para todos, no debíamos arriesgar otra vez a la ciudad, una vez lo hicimos aceptando a los chicos, pero resultó ser una buena idea. Pero no sabíamos que hubiera pasado si le hubiéramos dado esa oportunidad a Magneto

Cai al suelo de rodillas, Peter corrió hacia mi rápidamente al igual que los demás. Se dieron cuenta de las quemaduras en mi piel y rápido me llevaron de nuevo al laboratorio. La mitad del equipo se quedó conmigo y la otra se quedó en la ciudad para asegurar que todos estuvieran a salvó y que él ya no regresará.

AMOR ESCARLATA 2 ✔️ || Spider-Witch Donde viven las historias. Descúbrelo ahora