Alguien tenía que aprender [JULIANTINA]

Epílogo

"Unas cuántas semanas habían llegado lento desde que inició el último año y la graduación se miraba en lejanía ficticia. La clase no colaboraba tampoco haciendo que los bostezos se contagien entre todos los estudiantes y el ambiente se torne perezoso.

—¿Conocen lo que es asíntota? —pregunto en medio de la clase, alzando la mirada para ver si hay alguien que conociera el significado de tal palabra, pero por desgracia, no había quién.

Suspiré coragienta al ver una clase tan nula como lo es tercero de bachillerato; sin duda, un buen grupo respecto a conducta, pero deja mucho que desear respecto a participación. Parece que la vida les de igual, pero ¿a quién no a esa edad? Cuando tienes toda la vida por delante. Definitivamente lo único que están esperando es que suene el timbre.

Era frustrante para mi ver una clase completamente desinteresada en mi materia, para todo profesor lo es, pero de pronto, la estudiante del fondo, atenta a la situación paupérrima de la clase, decide alzar la mano para, al menos, decir lo que creía que era y en definitiva quizá motivar en leve porcentaje a la profesora.

Un brazo alargado se movía intensamente para tener la atención debida, pero yo ya conocía quién era la causante, me negaba a que fuera justamente ella la que contestara, porque de alguna manera, no quería que la clase se convirtiera en un circo. Algo en lo que aquella chica, era especialista. Solo recordar su respuesta de "la única familia que yo conozco es la mia" era suficiente para evitar darle la palabra, chistoretes y burlas en otra clase, aquí no. Miré alrededor para ver si coincidía con otra persona, si alguien más podía saber la respuesta, pero la voz de la joven insistiendo hizo que terminara por concederle la palabra.

—Señorita, usted, responda.

Pude notar al momento que la chica estaba sumamente nerviosa e incluso avergonzada de tener mi atención y la de todo el grupo puesta en ella. Era, sin duda, mi peor estudiante. Sin embargo siempre parecía que justamente, eso era lo que quería, atención.

—Asíntota está relacionada con la física más que con la química, ¿verdad? —preguntó un poco nerviosa por la intensa mirada de la clase al recordar las palabras que, seguramente, escuchó en su clase de física.

Fruncí el ceño. Sí, la joven tiene razón. Y me hizo sentir un cero al hacer que me diera cuenta de que la pregunta, en parte, no tiene nada que ver con mi materia.

Me dejó en silencio y pude sentir su incomodidad al ver que yo no pronunciaba palabra alguna y no hacía más que verla con el ceño fruncido. No era común eso en mí, por lo general siempre pensaba y contestaba rápido. Pero me sentía expuesta, aunque sé que su intención no era esa.

Después de unos segundos asentí y comencé a tener una chispa de esperanza en esa alumna que se oculta en la última fila, que le gusta hacer al payaso de vez en cuando con su amigo, que no deja de prestar atención y que no entiende absolutamente nada de mi materia.

Valdés continúa:

—Pues, recuerdo que es algo sobre lo que se desea con fervor, pero jamás se logra o se alcanza. Es física, pero también se lo considera parte de la literatura romántica.

Con los dedos índices dibujó en el aire una curva de inicio próspero a un final decadente que entendí a la perfección.

Entonces, esa chica logra sacarme una sonrisa, pero que guardo para mí y la escondo muy bien. Es verdad que esa palabra se me vino a la mente por el libro que acababa de leer la noche anterior y no dejo de pensar en la utopía ni en la asíntota que caracterizaban a la vida medieval. Los personajes vivían en ese mundo asquerosamente romántico, pero para mí, ese final, con la muerte de los dos me parecía encantador. Claro, era una simple historia, en la vida real resultaría una desgracia. Romeo y Julieta, sin duda, es un clásico patético.