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Capítulo 36.

Marzo 1960.

Jungkook miraba a Taehyung dormir plácidamente entre sus brazos, sonrió al verlo y el tenerlo tan cerca de él, después de permanecer un rato en el bosque ambos decidieron entrar a la casa, no cenaron pues el ojiverde no se sentía aun bien por su repentino ciclo, Jungkook lo llevo a la habitación de él y justo lo miraba dormir, el sol se había ocultado por completo y al pasar de las horas dejo de escuchar ruido en la casa, paso uno de los mechones rebeldes del azabache detrás de su oreja y beso su frente, sintió al ojiverde moverse en la cama y unos segundos después abrió los ojos.

—Jungkookie.

Murmuro el castaño mientras se abrazaba al azabache quien sonrió ante la acción de su novio.

—Aquí estoy bebé.

Dijo Jungkook para después abrazarlo de vuelta y besar los labios de su novio.

—Tengo hambre.

Susurro el mayor y Jungkook sonrió.

—Vamos a comer pequeño.

Dijo el azabache y se colocaron de pie de la cama, Jungkook tomo la mano de Taehyung y lo jalo fuera de la habitación mientras este caminaba detrás de él con un puchero en su boca y con sus ojitos casi cerrados por el sueño que aún tiene. Bajaron hasta la cocina de la casa y dentro encontraron algunas hoyas con comida, esa tarde Jaebeom caso con Seokjin un venado y esa fue la cena, Jungkook sirvió un poco a Taehyung y este comió junto a él, compartieron algunos besos en el transcurso, al terminar la cena Jungkook miro aquella casa del jardín vieja, arrastrando a Taehyung con él entraron dentro de aquel lugar, Jungkook miro las cosas dentro y toco con delicadeza cada objeto, sonrió al recordar que su madre solía pintar ahí, ese era su espacio, espacio que Jungkook amaba con su ser, miro el sofá cama y jalo a Taehyung con él para que se sentara, Taehyung cayó sobre el regazo del azabache y se sonrojo.

—Estamos en el espacio que mi madre ocupaba para pintar.

Dijo Jungkook y Taehyung sonrió mientras se recargaba en Jungkook.

—¿La extrañas?

Jungkook asintió y Taehyung puso sentir el movimiento de su cabeza.

—Jeon Mina fue una mujer muy hermosa, su pelo negro llegaba debajo de su cintura, siempre permanecía con sus ropas en orden y le encantaba tanto el cantar y pintar, cuando se casó con mi padre creyó su vida convertirse en un infierno, pero no fue así. Mi padre la amo tanto, la admiraba tanto, ella logro tenerle un afecto y un gran cariño por apoyarla y no juzgarla.

Dijo y Taehyung se confundió cosa que noto el azabache.

—Mi madre era una homosexual, sus padres descubrieron una aventura con una mujer, al principio mi madre creyó que su fin llegaría, pero le dieron una un mes para conseguir un esposo, mi padre apenas empezaba a trabajar en un laboratorio cuando la conoció en el mercado, una semana después se habían casado sin darle razones a alguien, mi madre logro liberarse de sus padres y estos fallecieron un año después en un accidente. Mi madre siempre creyó que mi padre la maltrataría, pero jamás fue así, mi padre la amaba inmensamente, dos años después de su matrimonio mi madre le conto la verdad y acepto estar con él, así me crearon, cuando nací por lo que me dijo mi padre ella me amo en el primer instante, le encantaba estar conmigo y siempre me cuidaba.

Jungkook miro como el ojiverde sonreía, sintió un beso en su mejilla y se sonrojo por la sorpresa.

—Una vez descubrí unas cartas que mi madre escondía detrás de un cuadro de sus pinturas más viejas, confundido tan solo era un pequeño de apenas ocho años, tomé todas las cartas y corrí a mi habitación y las leí una por una, alrededor de treinta cartas de amor de una mujer que amaba a mi madre. Jamás supe su nombre y tampoco me tomé el tiempo de averiguar cómo se llamaba, mi madre la amaba y cada carta de ellas me decía que su amor era imposiblemente posible.

Your Eyes Tell. (Kookv)Where stories live. Discover now