Atrápame (2ª temporada Búscame)

Capítulo 11

Una vez que recogimos a mis padres y realicé las presentaciones suficientes, nos dirigimos a recoger la tarta de cumpleaños. Parecía que todo marchaba bien, Carter charlaba animadamente con mis padres y estos se desenvolvían con amabilidad. Me gustaba la escena que contemplaba.

Tras recoger la tarta, volvimos a casa de Julia para terminar de preparar el cumpleaños. Apenas quedaban algunas horas para que empezase y queríamos que todo saliese bien.

Tuve que dejar a un lado mis diferencias con Maik, ya que tuvimos que ponernos de acuerdo en un par de ocasiones para colocar todos los objetos en sus respectivos sitios. Las mesas, las sillas, el castillo hinchable... Entre Maik y yo pudimos terminar rápidamente.

—Entonces...—Balbuceó indeciso. —Eres el padre de Ian.

Asentí y le miré, intentando descifrar hacia dónde quería llegar.

—Tenéis cierto parecido, ahora que te observo.

Coloqué parte de los regalos en la mesa y volteé para volver a mirarlo.

—Es lo que tiene la genética.

Él esbozó media sonrisa y asintió. Parecía que intentaba crear una conversación conmigo.

—Disculpa por lo de antes...—Soltó y supe entonces a dónde quería llegar con esos rodeos.

Me encogí de hombros y me acerqué hacia él para darle algunos toquecitos en la espalda.

—No importa, Maik. Comprendo tu situación.

Él asintió aceptando y viendo que no le había dado mucha importancia al hecho de antes.

—Nunca imaginé conocer al padre de Ian, para mí es como mi hijo.

Comprendía que para Maik, que no había escuchado una sola palabra sobre el padre del niño al que cuidaba, sería difícil que de repente se presentase el verdadero padre. No le culpaba, y me alegraba saber que al menos tenía esa pizca de culpabilidad que le hacía sentir mal ante los hechos de aquella mañana en la cocina. Parecía un buen hombre, sin duda.

Cuando pasaron las horas, los invitados iban llegando. Amigos de los padres de Julia, amigos de Julia de San Francisco, familiares de estos, e incluso Matt y Sarah con la pequeña Leah. A estos últimos no esperaba verlos aquí, aunque debí imaginar que iban a venir ya que se trataban de los mejores amigos de Julia. Para mí fue sin duda una especie de alivio entre tanto familiar suyo o amigo de sus padres a los que no conocía.

Mis padres se integraban bien, siempre los había calificado como personas muy sociables, y ello me alegraba. Sin embargo, me apenaba que mi hermana Ali no hubiese podido venir, pero me conformaba con que ella lo conociese en las navidades. El saber que Ian pasará absolutamente todas las navidades conmigo era sin duda el objeto de mi felicidad. Mis primeras navidades con él.

Pero eso sería dentro de unas semanas y hasta entonces tenía que reprimir mis ganas.

Cuando me quise dar cuenta, la fiesta se había llenado de niños pequeños revoloteando y corriendo por doquier, y por adultos bebiendo café, té y algunas infusiones, mientras que comían trozos de pastel y pastas variadas. Intentaba integrarme en las conversaciones pero por alguna extraña razón no me concentraba en ninguna. Lo que no me haría dudar que muchas de las personas que me hablaban pensasen que no me interesaba conversar con ellos.

—Eh...tío. Despierta. —Movía Matt su mano por delante de mi cara para que la viese.

Me sacudí mentalmente y esbocé media sonrisa.

—Disculpa, esta noche no dormí.

Matt soltó una pequeña carcajada y terminé de despertar la mente. Pude observar entonces que a nuestro lado se había introducido una joven chica que me miraba sonriente mientras bebía de una pajita su refresco. Cuando vio que la miré, ella dejó de beber y su sonrisa se pronunció dejando al descubierto sus dientes.