Tenemos que ir a China.

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Capítulo 41.

Pasaron las clases, poco a poco, pero pasaron. Fui directa a mi casa, abrí la puerta y ví a mi madre recogiendo muchísimas cosas.

-Mamá, ¿qué haces?

-Tenemos que hablar.

-¿Qué pasa?-pregunté con curiosidad-.

-Tenemos que ir a China.

-¿Qué?-pregunté con los ojos como platos-.

-Aunque, he pensado, que como estás en un curso bastante difícil que te quedes tú, ya que eres mayor. Tu padre, tu hermano y yo nos vamos.

-¿Pero por qué?

-Tenemos que ir a ver a la abuela, la van a operar de la cadera.

-¿Cuándo os vais?

-Pues creo que el miércoles, tenemos muchisina prisa por ir.

-Vale mamá.-suspiré-.

-Eso sí, te dejo con la condición de que estudies esa semana, y no quedes tanto con Daniel. Y sobre todo, nada de cosas raras.

-Vale mamá. ¿Pero qué la ha pasado?

-Se ha caído saliendo de la ducha.

-Joder.

-Y claro, al ser tan mayor pues la cadera...Y la tienen que operar.-dijo triste-.

-Espero que todo salga bien.

-Eso espero yo también.

-Bueno mamá, me voy a hacer los deberes y a estudiar, mañana tengo examen de matemáticas.-dije quitándome el abrigo, ya que todavía no me lo había quitado-.

-Vale. Cuando llegue tu hermano comemos.

-Genial.-dije mientras iba a mi habitacion-.

No hay más placer que quitarse el peso en la mochila, quitarte los zapatos y tirarte a la cama. O al menos para mí.

¿Iba a estar una semana sola? Quizá le debería decir a Daniel que se quede toda esta semana a mi casa. Sería fabuloso.

Así que así hice. Le mandé un WhatsApp explicándole todo.

-Claro que me voy contigo. Así pasamos mucho tiempo juntos.

INCOMPRENDIDOS. |Pausada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora