THE END OF THE FUCKING WORLD --The Umbrella Academy-- [[EN PAUSA]]

18. Por el meñique

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Comencé a caminar por la casa buscando a alguno de los chicos con quien pasar el rato y distraerme un poco, supongo que más tarde regresaría a lo de detener el apocalipsis con Cinco. Encontré a Klaus afuera, en un basurero. Ben estaba con él

-Hola chicos - saludé - ¡Ben! Estas aquí. ¿Puedo acompañarlos?

-Por supuesto hermanita - me respondió Klaus. Me senté junto a Ben, quien estaba en las escaleras de emergencia y seguí con mi lectura, dando atención a los chicos y al libro, levantando la vista de vez en cuando

-¿Qué haces Klaus? - cuestioné por fin

-Busco algunas cosas que se me perdieron. ¿Te gustaría entrar aquí y ayudarme un poco?

-No gracias

-Agh, ya que

-Oye ¿Cómo es que te apareces? -pregunté hacia Ben - Intente hacerlo, aunque claramente no lo logré. Quería verte, hacía mucho que no lo hacía

-Contrariamente yo sí. Te vi ayer por la noche, mientras dormías

-¿Ahora me espías? - dije "indignada"

-Bienvenida a mi mundo - intervino Klaus

-¿Sabes a dónde va esto? - negué con la cabeza -¿Recuerdas dónde dormiste ayer? Mejor dicho ¿Cómo y con quién dormiste ayer? - aclaró en voz baja para que solo yo escuchara. Levanté la vista del libro sonrojada

-Aaaahhhh - reí avergonzada al entender de que hablaba -¡Ben! Ssshhh. ¡Eso no se dice!. Es privado, confidencial y no se lo dirás a nadie ¿Ok?

-Ok - respondió riendo por la reacción que tuve

-¿Lo prometes?

-Lo prometo

-¿Por el meñique? - dije con una voz tierna, dulce e inocente, levantando mi dedo meñique, como si de una niña pequeña se tratara. A Ben esto le causo ternura, río un poco y me siguió el juego

-Por el meñique - respondió poniendo su dedo junto el mío ya que no podíamos entrelazarlos. -Solo ten cuidado ¿Ok? Quiero asegurarme de que estés bien y ten por seguro que siempre cuidaré de ti - sonreí enternecida por sus palabras. Quise abrazarlo pero por obvias razones tampoco pude. Me límite a responder con un sincero "Gracias".

Durante nuestra infancia también fui muy unida a Ben. Él y yo teníamos una gran relación de hermanos. Sabíamos perfectamente que ambos podíamos confiar y estaríamos el uno para el otro incondicionalmente. Yo siempre le contaba mis secretos, mis sueños, mis deseos, mis sentimientos... todo, y él lo hacía de igual manera conmigo, con la promesa de que ninguno revelaría nada, sellando tal compromiso con el juramento del meñique.

-¡¿Dónde están las cosas de papá?! - se quejó Cuatro

-¿Qué harán después? - pregunté siguiendo con la lectura

-No lo sé, ¿Podemos ir a ver una película? - dijo Seis

-¿O el océano?

-¡Cierren la boca! - pidió Klaus frustrado -Necesito encontrar esa cosa tan valiosa que había en esa caja ¡Para que Pogo me deje de fastidiar!

-Quién te manda a tomar las cosas y encima ¡botarlas al basurero! - reclamé de regreso

-Iba a preguntarte que estás haciendo, pero luego me arrepentí. No me interesa - dijo Cinco hacia Klaus, que estaba bajando por las escaleras de emergencia. Sonrió en dirección a mí y yo le devolví la sonrisa