𓂸𝐃𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐉𝐮𝐧𝐠𝐰𝐨𝐧 𝐞𝐬 𝐞𝐥 𝐨𝐦𝐞𝐠𝐚 𝐦𝐚𝐬 𝐝𝐞𝐬𝐞𝐚𝐝𝐨 𝐝𝐞𝐥 𝐦𝐨𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐲 𝐒𝐮𝐧𝐠𝐡𝐨𝐨𝐧 𝐮𝐧 𝐝𝐞𝐥𝐭𝐚 𝐬𝐨𝐥𝐢𝐭𝐚𝐫𝐢𝐨.
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•| Está historia no me pertenece es una adaptación creditos a la autora orig...
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De nuevo, en todo el camino hacia el departamento, Sunghoon no soltó la mano de Jungwon, aunque esta vez, el omega estaba seguro que era a propósito, porque el otro solía mirarlo cada tanto, sonreírle y dejar un beso en su mano con cariño.
Un domingo temprano, con todo el exterior abrigado en nieve parecía la excusa perfecta para que nadie saliera de su departamento, y los pasillos del edificio estaban tan vacíos que daba la sensación que todo el mundo los habían dejado para que ellos hagan lo que quisieran.
Sunghoon apenas terminó de cerrar la puerta con llave cuando Jungwon volvió a lanzarse sobre sus labios, sonriendo y respondiendo al instante, mientras comenzaba a quitarle prenda por prenda al otro, dando pie a que el omega hiciera lo mismo.
El camino hacia el dormitorio fue regado de ropa de abrigo que ahora era innecesaria.
Sunghoon alzó el cuerpo de Jungwon, y este enganchó sus piernas alrededor de las caderas del otro, sin dejar de besarlo.
El omega comenzó a frotar su bulto contra la parte baja del estómago de Sunghoon, haciendo un esfuerzo para llegar hasta el miembro del más alto, provocando que este suelte un jadeo contra sus labios.
Sunghoon dejó a Jungwon sobre la cama, de forma suave, pero se sorprendió cuando el omega fue un poco más brusco al girar sus cuerpos, cambiando de posiciones.
La sonrisa en los labios de Jungwon ya no era tan adorable, sino más atrevida.
El chico no le permitió hablar, quitando su remera para luego hacer lo mismo con la de Sunghoon, para continuar bajando los pantalones y boxers del otro, mirando el falo semierecto con un brillo en los ojos.
Sunghoon vió cómo el otro se relamió los labios y supo que Jungwon no pediría permiso.
El omega acercó su boca para pasar su lengua desde la base hasta la cabeza del caliente miembro de su hyung, haciendo que este gimiera bajo, mordiéndose el labio con fuerza.
Jungwon lamió un par de veces la cabeza, jugando con su lengua con la misma, y con el orificio en esta que comenzó a gotear presemen.
Sintiendo el falo cada vez más duro y erecto, metió todo el largo en su boca, ahuecando sus mejillas, succionando mientras pasaba su lengua sobre el mismo.
Escuchaba los gemidos bajos de Sunghoon, acompañando sus jadeos, que no llegaban a silenciarse del todo por el miembro en su boca, subiendo y bajando, haciendo presión con sus labios alrededor del mismo.
Sintió los dedos de Sunghoon enredarse en su pelo, dando leves caricias en su cuero cabelludo mientras lo ayudaba con el ritmo.
Sunghoon sentía que no iba a aguantar mucho más tiempo sin venirse en la boca de Jungwon, aunque no le disgustaba la idea ni un poco.
