Una Oportunidad

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Se supone que ya no iba a tener nada que ver con esa empresa de matones profesionales pero no puedo creer que me llamara ese tipo arrogante de nombre Blitz, según tengo entendido que requería de mi presencia para hacerme una encuesta después del trabajo realizado, la verdad me pareció sospechoso que le pedí de favor que aprovechando que me había llamado al móvil que me hiciera las preguntas pero él insistió tanto que nos viéramos en persona que acepte, así que me dirigí a una cafetería que estaba cercas de su oficina a la hora en que me lo había pedido. Ahí estaba él haciendo fila para pedir un café, en cuanto me mira me saluda y me hace una seña para que me ponga delante de él para pedir algo de tomar, nos atendió amablemente la cajera y nos dirigimos a la primera mesa que vimos en espera de nuestros cafés, note que se me quedaba viendo mucho sin decir nada así que tome la decisión de ser la primera en entablar la conversación:

--señor Blitz, ¿seria tan amable de empezar con su encuesta?--

--¿encuesta? ¿Qué encuesta?--

--la que me dijo que tenia que responder, ¿acaso olvido nuestra conversación de la mañana?--

--¡ah! cierto, esa encuesta--

--¿podría dar inicio con ello?--

--claro, señorita Mayberry--

--sabe muy bien que soy señora, no necesita tratar de adularme con eso--

--bueno, aquí no esta casada ¿o si?--

--¿podría hacerme ya las preguntas?--

En eso nos habla la cajera diciéndonos que ya estaba lista nuestra orden, el señor Blitz decide ofrecerse a ir por ellos, en cuanto vuelve no solamente trae unos cafés, sino que también una rebanada de pastel la cual me entrega junto con mi café, acomodo mis lentes y le digo:

--yo no ordene esto--

--cortesía mía--

--no me agrada lo dulce--

--esta bien, podemos compartirlo--

--¿puede iniciar con su encuesta?--

--claro--

Veo que saca una libreta y una pluma de su saco para dar inicio:

--bueno, señorita Mayberry, de la escala del uno al diez ¿Cuánto le pone al servicio que le brindamos?--

--insisto, es señora, le pondría un diez porque lograron satisfacer mis necesidades--

--y no es lo único que puedo satisfacer--

--disculpe--

--perdón, me salí de las preguntas ¿en algún momento dudo de nuestro profesionalismo?--

--si, solo por el incendio que presencie pero me alegra haber confiado en usted--

--¿le pareció justo el precio que le dimos?--

--es el costo perfecto de la venganza--

--¿saldría conmigo esta noche?--

--claro...--

Un momento de silencio se presento entre los dos mientras nos veíamos a los ojos:

--perdone, señor, creo que no, no, no escuche bien la pregunta-- 

--pregunte que si saldría conmigo esta noche, señorita Mayberry--

--espere ¿Qué tiene que ver la encuesta con eso?--

--que en realidad no existe tal cosa, solo quise un pretexto para poder hablar con usted ya que me pareció bastante interesante--

--¡yo no soy interesante!--

Hechizo de EsclavitudWhere stories live. Discover now