Más de 30 Días Shipp [Mono x Seven]

Día 50

Mimado y celoso
Temática: Adolescente y niño
Personajes:
-- Mono 19 años
-- Seven 10 años

Por favor no me maten por donde va este episodio, solo gozenlo, y perdón si mi forma de escritura es mala, ando muy feliz para pensar bien akskdkk.

¿Qué tiene de positivo ser mimado por un adolescente?, Muchas cosas, para Mono mimar y cuidar a Seven era algo especial, amaba a ese niño curioso y siempre tan escandaloso para tener su atención.

Hoy Mono llevo de la mano a Seven para comer helado, el pequeño estaba feliz de tener una recompensa por "sacar 10 en su examen de matemáticas", Mono sonrio por la alegría de su pequeño.

En su camino a la heladería, Six se topó con ambos y decidió entablar una conversación con este, mientras que Seven miraba de mala gana a la chica que obstaculizaba a su premio congelado, optó por jugar a la ley del hielo una vez que dichos adolescentes terminaran su conversación.

Seven creando su drama soltó la mano del más alto, cruzándose de brazos, Llegaron a la heladería y con una bonita sonrisa miro a su pequeño.

-- Bueno Seven, elije el sabor que quieras, te lo ganaste -- el nombrado le dio la espalda, arqueando sus cejas miro al menor.

-- No quiero helado -- Si, estaba taaan enojado, siempre conseguía lo que quería y al parecer hoy no sería la excepción a ello.

-- ¿Ah?, tal vez una malteada o un cupcake seria genial para ti, por favor Seven, elije algo -- dijo Mono en tono de súplica, dicho niño se dio la vuelta para ver con enojo al mayor y le saco la lengua, de cierta forma estaba celoso pero solo amaba el drama.

-- No quiero nada, cómprate tu el helado y vamos a casa -- refunfuñando se sentó en una de las mesas del local de la heladería, Mono sabía como calmar a su pequeño Mimado.

Levantandolo en su brazos, camino a la caja para pedir un helado en forma de pingüino, bueno solo parecía una paleta helada normal pero con decoraciones mal hechas.

Pagando dicha paleta camino con el menor en brazos hacia su hogar nuevamente pues Seven en ese estado era alguien muy terco, lo amaba mucho pero mejor optar por llevarlo a casa.

-- ¿por qué estás enojado? -- Seven para evitar hablar metió la paleta entera en su boca y miro hacia el frente, había dos posibilidades, Mono enojado o que se atragante y bueno, no pasó ni la una ni la otra.

-- ¡Seven!, saca eso de tu boca, así no se come te vas a atragantar -- obedeció a regañadientes pero siguió comiendo su paleta, ya llegando a la casa de Mono, el menor fue bajado de los brazos del adolescente para correr por la casa en busca de sus cosas ignorando por completo al mayor.

-- Seven... Seven... ¡Steven Harrison McCartney! -- grito ya enojado porque el niño no hacia caso para que vaya a cenar, soltando sus crayones miro con miedo al más alto que tenía un aura enojada, Como casi nunca le gritaba, cual cachorro asustado corrió a la cocina para cenar lo que el mayor preparó.

Ahora Mono se estaba arrepintiendo de haberle levantado la voz, si antes lo ignoraba ahora no le habla.

-- Perdón Seven es que no me hacías caso y bueno gritarte no fue buena opción -- el menor solo negó con la cabeza para comer más rápido

Ese día, Mono dio besitos en el rostro del más bajo, claro, mejillas, frente, nada malo, pues amaba a su niño como un hermano, uno muy celoso y sobreprotector.

Seven siempre era mimado por el mayor, con o sin sus rabietas o berrinches, obtenía lo que quería.

Hoy en un día normal, Mono llevo al menor pues no tenía con quien dejarlo, su grupo de amigos estaban encantados con Seven, este era muy energético y callado, era mimado por Two, llenándolo de caricias y dulces, Mono algo Celoso, agarro a Seven para sentarlo en su regazo y darle su teléfono para entretenerlo.

-- Ya Mono, no seas celoso -- Seven se había puesto a jugar Candy crush ignorando lo que pasaba a su alrededor, siendo abrazado como un oso de peluche, Mono solo gruño en respuesta.

Una tarde normal para todos, pues era normal ver a Mono con ese comportamiento cuando se trataba de su hermano adoptivo.