Fell as love - Uraraka x Bakugo [Mari & Eiji]

2 | Mejor amigo

     • Bakugo pov's •

I. Impulsos bajo control.

     En cuanto llegué a casa lo primero que hice fue irme directamente a mi habitación, sin saludar a mi papá que estaba en la cocina. No me sorprende que no se haya quejado por esto, a fin de cuentas, no es el tipo de hombre que tenga demasiada autoridad o la suficiente para regañar a su hijo por el mero hecho de no saludar.

     Tras cerrar la puerta, lancé la mochila directamente a la cama y le dí un fuerte puñetazo al costal de boxeo que tenía colgado cerca de una de las esquinas de la habitación, para luego apoyarme en el escritorio y bajar la mirada.

     — Tsk... Así que soy un debilucho, ¿Eh? — pregunté, recordando la escena de la mañana.

     Poco después de salir de la casa, una señora pidió ayuda porque un sujeto le había robado la cartera, pero en cuanto me puse en marcha para atraparlo, este simplemente usó su Kosei para crear ilusiones de sí mismo que se dispersaron en todas las direcciones al mismo tiempo, así que le perdí la pista por un rato hasta que finalmente le dí una paliza, y por si fuera poco, el muy bastardo me dijo que era débil y generó una ilusión de un yo pequeño llorando.

     Fue tanta la rabia al ver esa ilusión que, de no ser porque en la mañana hacía frío y no estaba segregando demasiada nitroglicerina, el Stun Impact lo habría fulminado junto a gran parte del vecindario. Al final el tipo fue llevado a la comisaría por un héroe que llegó tarde al llamado, pero que de todas maneras me agradeció por ayudar.

     — ¡MUERE! — grité, lanzando una explosión controlada hacia una pared excesivamente reforzada, la cual era capaz de soportar una de mis mejores explosiones —. ¡NO SOY DÉBIL BASTARDO! ¡YA NO SOY DÉBIL!

     — ¡KATSUKI, DEJA DE GRITAR! — ordenó mi mamá desde el primer piso, escuchándose al mismo tiempo un potente estruendo.

     Me senté de forma agresiva en la cama y comencé a disparar sucesivas explosiones hacia la pared, ocultando con ello la infinidad de insultos que estaba soltando, hasta que tras dos minutos me harté de eso y me dejé caer con los brazos abiertos sobre el colchón.

     — Vaya mierda... Primero el nerd me deja en ridículo con el One For All y ahora un tipo cualquiera me dice que soy un debilucho — susurré, cubriendo mi vista con el brazo —. Ah... Ya no soy un crío...

     Entiendo perfectamente que con las capacidades actuales de Deku el simple hecho de intentar ganarle en un combate uno versus uno suena estúpidamente ridículo, y de no ser porque lo sé de primera mano, diría que aún tengo una mínima posibilidad de volverme el héroe número uno. Las explosiones que hago ya no son las mismas que en primer año, pero él tampoco se ha quedado atrás y con su dominio del One For All a día de hoy, pelear con él es sumamente jodido y abrumante.

     Los dos hemos superado a All Might, eso lo sabemos claramente y la mayoría del curso lo admite, al igual que los profesores, pero, si bien el inútil es mi mejor amigo, eso no significa que me vaya a quedar de brazos cruzados mientras que él se queda el primer puesto así como si nada. Los dos somos mejores héroes que All Might, pero él lo ha sobrepasado a un nivel mucho mayor que el mío. Y vale, lo acepto, porque el inútil ha progresado más lento que yo y soy testigo del esfuerzo que ha tenido que hacer para llegar a donde está ahora, y él también sabe lo mucho que me ha costado seguirle el paso.

     Nunca pensé que diría esto, pero lo respeto como persona.

     — ¿Quién mierda llama ahora? — pregunté, sacando el teléfono que sonaba de forma escandalosa —. Espero que no sea Denki con alguna de sus tonterías otra vez...