La vida es larga para aquellos que no supieron vivirla con gracia, en cambio, la vida es corta para aquellos que vivieron con felicidad, con amor.
Para mi, no fue suficiente vivirla a tu lado, es por eso, que en nuestra próxima vida, prometo buscart...
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Había transcurrido la semana con rapidez, junto a T/N habíamos quedado en salir juntos a comer, por lo que mis ansias de verla eran indescifrables.
En ningún momento perdí el contacto con ella, nos mensajeabamos, llamábamos, hablar con ella me provocaba calma, aquello que no podía sentir con nadie, lo había encontrado con ella.
— Te veo enamorado —chistó mi acompañante.
— No te incumbe mi vida —respondí.
— Si vamos a trabajar juntos en la nueva compañía, debemos aprender a llevarnos mejor, Senju.
— Tonterías, lo nuestro es meramente laboral, no importa nuestra relación, Uchiha.
Mire su cabello negro por el rabillo del ojo, volví a mi posición y miré el celular, aún no había respuesta. Sentí la mirada de aquella mujer recorrerme, sólo mirarle fue suficiente para que desviara los ojos.
— ¿Qué quieres, Sumi? — pregunté sin mirarle.
— Me pareces atractivo, es todo — sonrió, observando sus uñas.
Ignoré su comentario, continúe en el celular, esta vez, hablaba con Hashirama, insistía en entablar una amistad con los Uchiha, al menos, que fuera yo quien lo hiciera. Lo único que estaba dispuesto a hacer era entablar una relación para los fines de la empresa.
— Deberías disimular mejor que no me quieres cerca, querido — habló burlona — Estamos aquí por un fin, no porque queramos, aunque no me molestaría llegar a algo más — coqueteó, cruzando una pierna y lanzando una mirada seductora.
— No estoy interesado — respondí a la brevedad.
— ¿Será por aquella chica por la que tanto piensas? - le miré - Por supuesto que lo es — rió.
— Mi vida personal no te incumbe, así como no me interesa en lo más mínimo la tuya — tomé el saco que estaba en la silla y me levanté de la silla — Puedes quedarte, dile a mi secretaria que te indique la salida cuando desees irte.
Salí de la oficina en dirección al auto, sabía que probablemente metería en problemas a Hashirama, lo compensaría después, ahora mismo quería ir a verla y no planeaba estar con nadie más.
Tenía que ir a mi departamento y cambiar de ropa, por primera vez, quería estar presentable para alguien.
Tomé una ducha rápida al llegar al departamento y observé el armario, la mayoría de las camisas y pantalones que poseía eran de vestir, debía, al menos, comprar ropa para salir.
Quizá era en estas situaciones cuando observaba lo que realmente necesitaba que anteriormente no me importó tener.
Vestí lo más casual que encontré sin que pareciese ropa de oficina, tendríamos una cita o, al menos, es lo que eso pensaba.
