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Pasan los días y con ellos las heridas de WonWoo se desvanecen en su piel. A pesar de las circunstancias, ha sido un tiempo que han aprovechando para estar juntos y recuperar esas semanas en las que se distanciaron.

MinGyu ha sido todo atenciones y no hubo un instante en el que la presión de su cuido o la dependencia constante le hiciera perder la calma, siempre atento a la forma de hacerlo sentir mas cómodo sin sobrepasar esa línea a la que WonWoo se mantenía tan alerta, en un intento de seguir diferenciando a su novio del hombre que cuidaba de él.

Tardes recostados uno junto al otro, poniéndose al corriente con sus series favoritas o compitiendo hasta entrada la noche mientras jugaban alguno de los videojuegos que habían abandonado por el trabajo.

Seulgi llegó a visitarlo algunas veces e incluso Jeonghan había llegado a invadir la sala de estar después de descubrir que tenía que estar encerrado en casa todo el día al igual que él.

Le hablaba de lo fastidioso que era su jefe que no dejaba de solicitar material fuera de tiempo, de la última película que vieron antes de que Cheol saliera de la ciudad por unos días y tampoco tenía reparos en hacerle toda clase de preguntas, su curiosidad floreciendo sin tapujos cada vez que WonWoo respondía a sus dudas que sólo hacían crecer sus incógnitas cada vez más.

Desde aquellas preguntas que le hacían la mayoría de las personas, si era verdad que no podía sentir nada o si tenía la oportunidad de volver a caminar. Tal vez, si hubiera sido cualquier otro le hubiera molestado aquella invasión a su privacidad, pero el encanto natural de JeongHan y la forma en la que sus ojos brillaban de fascinación cada vez que le respondía, hicieron todo mucho más fácil.
Aunque también ayudaban los bocadillos que llevaba de la pastelería a unas calles del condominio.

— Deberíamos trabajar juntos —Jeonghan resuelve convencido después de darle un sorbo a la botella de soda—

Las cejas de WonWoo se levantan cuando no comprende a qué se refiere con ello y Jeonghan se deja caer en el respaldo del sillón.

— Estuve investigando después de que hablamos la primera vez y las únicas columnas dirigidas a público con discapacidad están en revistas especializadas y ni siquiera son de fácil acceso —WonWoo revira los ojos porque es algo que pasó de primera mano, incluso en Internet, el buscar cualquier información sería encontrar el mismo artículo citado una y otra vez en las primeras cien entradas—

— ¿Y dónde lo pondrían? ¿Entre la sección de deportes y la de belleza? —WonWoo sonríe con sorna, imaginando a los lectores pasando de largo al igual que como lo hacían con él— Nadie va a leerlo.

— Y si nadie lo publica será aún más difícil —Trata de presionar un poco más, sus dedos jugueteando con la rosca mientras le da tiempo a WonWoo de pensarlo— Escucha, antes de conocerte el tema ni siquiera me había pasado por la cabeza, uno no piensa en lo necesaria que es una rampa hasta que te encontramos atrapado en las escaleras.

— Eso fue una suerte —WonWoo le agradece y Jeonghan le devuelve la sonrisa restándole importancia—

— Ahora cada vez que salimos Cheol busca una, ni siquiera se da cuenta pero lo he visto. Como si fuera uno de esos agentes del gobierno que evalúa estructuras —WonWoo suelta una risa porque MinGyu sí cree que puede denunciarlos—

— MinGyu hace lo mismo, el otro día puso una mala calificación a un bar porque el baño era diminuto.

—...y la próxima vez que alguien lo busque en el mapa van a descartarlo, es mala publicidad. —WonWoo suspira y sus labios se transforman en una línea, la cantidad de lugares a los que tuvo que someterse a prueba y error hasta descubrir un puñado en los que podía moverse con facilidad—

Steps - Meanie Donde viven las historias. Descúbrelo ahora