tres

24.2K 760 65
                                    

Hoy no debía ir a la escuela, así que decidí mandarle un regalo a mi pequeña princesa, la verdad no sabía mucho de sus gustos, pero poco me importaba, ella igual lo tendría que recibir.

Me dirigi a mi despacho, y empecé a buscar en la computadora que comprarle, mire varias páginas y al final termine por comprarle un peluche color rosa y una loción en forma de corazón con olor a fresa, ingrese su dirección y dije que colocaran una nota que dijiera.

"Eres muy adorable pequeña princesa"

Así estaba bien, termine de pedirle todo a la tienda, y decidí llamar a mi amigo, el tenia una gran empresa, y yo ya no quería ser profesor, tal vez si me uno a el pueda obtener más ingresos y pueda ver como estar con Heidy, al final ella me tendrá que pertenecer, solo a mi.

Cojo mi teléfono, y marco a mi amigo, Anthony será de gran ayuda en este momento.

- ¿Que tal Anthony? - dije de forma alegre

- Hola Marcus, ¿como te encuentras? - respondió mi amigo, de fondo pude escuchar la risa de una mujer.

- Bastante bien amigo, pero noto que estas ocupado no quiero tomarte tanto tiempo - Estaba nervioso, pero sabia que el no me diría que no - Quería saber si me podía unir a ti empresa, tu sabes que ser profesor no es lo mío, y cambiar de ambiente me vendría bien -

- Oh claro que si maurice, ese curso que hicimos en último grado de la universidad de finanzas te vendrá de maravilla, puedes venir dentro de dos días, te explicaré todo -

- Muchas gracias Anthony, nos veremos en dos días-

- De nada maurice, adiós- y colgué

¡bien!, esto no podria estar marchando mejor, pronto compraría una casa para mi pequeña, si, tendrá un gran jardín, y también debería empezar a leer sobre finanzas, no puedo darme el lujo de ir sin saber tan poco, debería empezar a involucrarme más en las finanzas.

Llevaba ya tres horas en mi computadora leyendo lo que pudiera en finanzas, no era tan difícil, pero unos gritos fuera de mi apartamento me sorprendieron, no era la primera vez que ocurrían, debía ser el vecino de al lado otra vez, pero ahora se escuchaba como si le gritara a una adolescente, así que decidí ir y ver. Al llegar al pasillo no fue una muy grata sorpresa lo que vi, era Heidy, ese hombre le estaba gritando, ¿como se atreve? Me dirigi a paso rápido hacia ella, al verme los dos callaron, yo solo la tome del brazo, la alejé de el, los dos me miraron sorprendidos, poco me importo, al notar que aquel horrible viejo me quiso decir algo le mire mal, Maldito bastardo.

Al entrar a mi departamento, ella no reaciono o dijo algo, solo me miraba confundida, pero estaba bien, yo solo la sente en el mueble, y comenze a revisarla de que no estuviera herida, llevaba un vestido blanco de tirantes, era bastante corto, no me gustaba eso, pero al parecer estaba bien.

- Hey, ¿estas bien? Di algo - le dije mientras le alzaba la mirada.

- Yo lo siento mucho - rápidamente se paro y trato de irse, oh no, eso si que no preciosa.

- No te iras, el podría hacerte algo, ven - la tome y la sente a mi lado, pude sentir sus piernas chocar con las mías, Maurice calmate.

- Yo de verdad, no quería que usted viera eso, era mi tío, lo lamento de verdad - ¿que hacía ella donde su tío?

- No te preocupes, ¿quieres agua o algo? -

- No, yo estoy bien, no se preocupe, ¿me podría ir ya?

- Lo siento, pero no, te quedaras esta noche, tengo ropa que podría servirte, mañana te devolveré a tu casa, no te preocupes - ella me miraba con miedo, no tenía razón, yo solo quería cuidarla, pero en el fondo de mi esa mirada me gustaba, cachondo me ponía - y no esta en discusión, se una buena niña y pasa la noche aquí.

Papi MaloWhere stories live. Discover now