Lo único que Hoseok quería era huir.
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[Min YoonGi → α]
[Jung HoSeok → Ω]
[M-preg☁️]
Todos los derechos reservados.
Fanfic hecho por mí.
No aceptó copias ni adaptaciones sin autorización.
-LittlxPrincxss
Advertencia: Angst, algo de smut y algunos temas delicados. Algunas partes de la perspectiva de Hoseok y otras de Yoongi. Mención de otros ships.
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El alfa no sabía cómo había logrado llegar al departamento de Hoseok con el mismo en brazos junto a Soobin, las cosas realmente se salieron de control y ahora él debía hacerse responsable al haber presenciado aquella no tan agradable escena. Aunque agradeció el que Jimin llamará por teléfono al pelinegro por lo cual tuvo que contestar el alfa, así le explico un poco la situación y después de un pequeño silencio le recomendó llevarlo a casa para que descansará.
Un pequeño suspiro cansado salió de sus labios al ver como el menor descansaba en su cama junto al cachorro. Permaneció recargado en el marco de la puerta sin perder de vista a ambos menores.
Su ceja se alzó cuando vio que el pelinegro tanteaba entre sueño bajo de su almohada y de ahí sacaba... ¿Su sudadera? Apretó sus labios para evitar sonreír mientras veía como el contrario abrazaba la prenda y al pequeño Soobin quién solo balbuceo pero no despertó.
No podía negar que aquello fue tan cálido para su corazón que no pudo apartar la mirada de aquel omega de piel apiñonada que abrazaba con fuerza su sudadera mientras sus labios yacían entreabiertos, sus pestañas descansaban sobre sus pómulos y su negro cabello era un desastres. Miro al cachorro que descansaba a su lado y apretó un poco sus labios, claro que tenían un pequeño parecido físicamente, quería creer que en lo que más se parecían era en la actitud.
❝ — Gigi, pensé que ya te habías olvidado de nosotros — Puchereo el infante cuando se alejó de los brazos ajenos— Mami Hoho y yo te extrañamos mucho. ❞
❝ — ¿Oh? ¿Ese es el pequeño bastardo? — Una sonrisa burlona apareció en los labios de la mujer.
— ¡Cállate! — El omega apretó más a su hijo en sus brazos, intentando que no escuchará nada.
— Y tu jurabas no saber de qué hablaba, yo sabía que lo estabas escondiendo —La mujer ignoraba todo lo que el pelinegro decía y como pudo se inclinó para ver un poco la cara del niño aunque Hoseok lo evitaba— Oh, se parece tanto a su padre.
— ¡Mi hijo no se parece a ese bastardo! — Aquello parecía salir desde lo más profundo de su ser. ❞
Aquellos recuerdos le llegaron como golpe y suspiro con total calma mientras se acercaba un poco a los dos que dormían en la cama, se inclinó para así dejar un beso en ambas frentes.
— Sea cual sea la situación, no pienso alejarme de ti — Susurró contra la piel de Hoseok.
Se dio media vuelta para salir de la habitación y dejarlos descansar, esperaría hasta que despertarán.
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