Nada esta bien

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Capítulo 7

Seth

- Cobra el dinero, tengo que ir a otro lugar.

Cierro la puerta del auto y me alejo de toda la multitud.

- ¿Vas a ver a Rylee? - pregunta Liam con evidente preocupación

- No le voy a hacer daño, lo prometo.

- Tal vez sepa adecuarse a nuestra
vida - suspira - No quiero verla mal, es como una hermana para mi.

- Creo que sí no le decimos antes esto ella lo averiguara y no saldrá muy bien.

- Y va a terminar lastimada, por suerte solo fue una caída del techo.

Liam se despide de mi y voy a mi auto, conduzco hasta un café cercano y compro uno para mi y uno para Rylee, era ya algo tarde, no sabia si iba a estar despierta.

Toco el timbre y no recibo respuesta hasta que escucho como algo cae y la voz de Rylee. Intento abrir la puerta pero esta con seguro, decido cubrir mi mano con la chaqueta y romper la ventana para poder quitar el cerrojo de la puerta.

- Joder Rylee.

Corro al ver que esta tendida en el suelo con los brazos extendidos como si fuera hacer un ángel de nieve, dejó el café y mi chaqueta a un lado, me acerco para ver la manera en poder levantarla

- No, no me levantes.

- ¡No puedo dejarte tirada en el suelo!

Esta mujer está loca.

- Claro que sí, esta muy cómodo, compruébalo tú mismo.

Me hace una seña para que me acueste a la par suya lo cual dudo un momento porque puede estar lastimada, al menos no había sangre a la vista era buena señal.

O esta sangrando internamente.

- Tienes razón esta cómodo, ¿qué te sucedió?

- ¿No es claro?, mi cuerpo quiere matarme y lo único que quiero es un baño caliente y comer pizza, pero no cualquier pizza si no una de pollo con queso, mucho queso.

Pienso un momento en cómo puedo ayudarla y solo se me ocurrió en complacer sus deseos.

- Prometo que no te dolerá.

La cargo por las escalera y la dejo en su cama, por suerte no pesaba mucho y era fácil cargarla

- ¿En esta puerta está tu baño?

Estaba habitación tiene demasiadas puertas.

- No, ese es mi clóset, la siguiente es mi baño.

Abro la puerta tomándome con un baño perfectamente arreglado, enciendo el chorro de la tina para que pueda darse su baño y le agrego burbujas.

- Vamos.

- ¿A dónde? - me observa extrañada

Profundo +18 | HDVACDonde viven las historias. Descúbrelo ahora