𝐋𝐄𝐓'𝐒 𝐅𝐔𝐂𝐊 𝐓𝐎𝐆𝐄𝐓𝐇𝐄𝐑 ──── 𝐉𝐎𝐇𝐍 𝐌𝐔𝐑𝐏𝐇𝐘

05 | Exiliado

—¡Trae a la niña, Bellamy!—gritó Murphy mientras los demás estaban dentro de una carpa.

—¿Por qué, Charlotte?—preguntó Sammay.

—Porque trate de matar mis demonios—miró a Bellamy—Como me dijiste.

—¿De qué mierda está hablando?

—Ella me malentendio. Charlotte, no quise decir eso.

—¡Tráela! ¡Ahora!

—No dejen que me hagan daño.

—Si tienen alguna idea, hablen.

—Ahora si te callas.

—Esos son sus muchachos—dijo Finn y Sammay suspiró.

—Esto no es nuestra culpa. Si ella me hubiera escuchado esos idiotas seguirían haciendo el muro.

—¿Quieres construir una sociedad, princesa? Vamos a construir una sociedad, trae a la niña—dijo Murphy desde afuera.

—¡No! Por favor, Bellamy.

—Escucha Charlotte, todo estará bien. Sólo quédate con ellos—miró a su hermana, a Finn y a Clarke, y luego salió, Sammay miró a Charlotte, agarró su mano y salieron de la carpa sin que nadie los viera.

Corrieron por el bosque y después de unos minutos sin saber a dónde iban, Clarke habló.

—Por favor, al menos dime que tienes un plan y que no vagamos sin rumbo en el bosque—le dijo a Finn.

—Tengo un plan.

Charlotte intentó tomar la mano de Clarke pero ella se apartó bruscamente.

—¿Qué diablos crees que estás haciendo? Que te salvemos no significa que estás perdonada, ¿entendiste?

—Clarke.

—¿Qué?—Sammay jaló a Charlotte, poniéndola a su lado.

—Es una niña.

—Es una asesina—miró a la niña—Mataste a alguien, Charlotte. Le quitaste la vida. ¿Te paraste a pensar en ese por un segundo? ¡Mírame!—la niña sollozó—No puedes asesinar a una persona para sentirte mejor.

—¡Charlotte!—escucharon que gritó Murphy—Ninguno de los tres podrán salvarte.

—Debemos correr—dijo Sammay.

—Podríamos hacer eso. Pero me gusta más mi plan—dijo Finn y abrió una puerta que estaba en el suelo—Entren.

—Muy inteligente, caminante espacial—encendieron unas linternas y miraron todo, Finn encendió unas velas—¿Qué es este lugar?

—Por ahora, un hogar.

(...)

Sammay tapó a Charlotte con una manta que Finn le dió.

—No puedo creer que hayas mantenido este lugar en secreto.

—Vamos, Clarke. ¿Qué sentido habría tenido contarles a todos?

—Algunas cosas podrían haber sido inútiles—dijo Clarke y Sammay se sentó en un sillón que estaba allí.

—¿Como qué? No hay armas. Toda la comida venció hace 90 años.

—Si, pero podríamos reciclar, compartir con el grupo—Finn le dió un bote con cosas para pintar.

—Puedes compartir esto con el grupo si quieres.

—Compartan su amor en otro lado—dijo Sammay, rodando los ojos, y los tres rieron.

—¿Qué encontraste?—se sentaron al lado de Sammay.

—Bueno...—les mostró una foto de una familia—Parece que nunca llegaron aquí.

—No, quizás las bombas los sorprendieron. Tanta preparación... que desperdicio.

—No lo sé. Tal vez tuvieron suerte. No podían más que vivir unos años aquí. Y cuando no tuvieran comida se volverán locos, habrían abierto la puerta y... muerto en unos días. O tal vez antes. En fin...—dejó la foto en la mesa y miró a Charlotte—¿Qué vamos a hacer con ella? Si no hubiera enfrentado a Murphy, esto no hubiera pasado.

—No sabias que iba a pasar algo así—dijo Finn.

—Bellamy lo sabía. Creemos que los terrestres son una amenaza. Nos estamos aniquilando. Tiene que haber consecuencias.

—No podemos colgar personas.

—No.

—Debemos resolverlo antes de que Murphy nos mate por ayudarla. No es de los que olvidan y perdonan.

Sammay echó su cabeza hacia atrás y cerró sus ojos.

(...)

—Charlotte no está—escuchó Sammay y abrió sus ojos, los sobó y miró a su alrededor—Debemos buscarla—dijo Clarke.

Sammay se levantó y salieron del búnker. Corrieron por el bosque y Finn alumbró con su linterna unas huellas.

—Alguien estuvo aquí.

—¡No! ¡Murphy!—escucharon que gritó la niña y caminaron hacia allí, vieron a Murphy con una gruño de chicos y a Bellamy y Charlotte cerca del borde de un precipicio.

—¡Bellamy! ¡Basta!—Clarke miró a Murphy, acercándose a él—Ya fue demasiado. Cálmense y hablemos de esto—Murphy la agarró y puso un cuchillo en su cuello.

—Ya estoy harto de escucharte.

—Suéltala.

—Apártate o le corto el cuello.

—No. No, por favor, no la lastimes—pidió Charlotte.

—¿Que no la lastime? Muy bien, hagamos un trato. Ven conmigo ahora y la dejaré en libertad.

—No lo hagas, Charlotte.

Quiso caminar hacia ellos pero Sammay y Bellamy la agarraron.

—¡No! ¡Tengo que hacerlo!

—Murphy, esto no pasará.

—No dejaré que nadie más muera, no por mi culpa, no después de lo que hice—dijo la niña casi llorando y se lanzó por el precipicio.

—¡Charlotte!—Sammay intentó agarrar su mano, casi cayendo, pero su hermano la sujetó. Bellamy volteó para mirar a Murphy.

—Bellamy...—él se acercó y lo lanzó al suelo, golpeándolo.

—Bellamy basta. Lo matarás—Sammay se acercó a él y lo jaló, alejándolo, se puso enfrente cuando quiso volver para golpearlo y agarró sus brazos.

—¡Suéltame! Él merece morir.

—¡No! Nosotros no decidimos quién vive o muere. No aquí abajo.

—No comprendo, si dices que la gente tiene derecho a decidir...—empezó a decir Bellamy pero Clarke lo interrumpió.

—No, estaba equivocada—dijo Clarke—¿Si? Ustedes tenían razón—miró a Sammay y a Bellamy—A veces es peligroso decirle a la gente la verdad. Pero si queremos sobrevivir aquí, no se puede vivir con "hacemos lo que queramos". Necesitamos reglas.

—¿Y quién pondrá las reglas? ¿Tú?—preguntó Sammay.

—Por ahora, nosotros tres, ¿está bien?

—¿Y qué pasará con él? ¿Regresaremos con él al campamento como si nunca hubiera pasado nada?

—¡No!—Sammay miró a Murphy que estaba en el suelo—Lo exiliaremos—Bellamy agarró a Murphy de la camisa y lo arrastró hasta el borde del acantilado, sin dejarlo caer.

—Si te veo cerca del campamento, volveremos aquí. ¿Entendiste?—él asintió y Bellamy lo lanzó al suelo—Ahora ustedes cuatro, pueden volver al grupo y seguirnos, o irse con él a morir—Decídanlo—caminó hacia el campamento y todos lo siguieron pero Sammay se quedó mirando a Murphy, se arrodilló frente a él y sonrió con burla.

—Que nos volvamos a ver—dijo y se alejó.