COCHLEARIUM de peccatis exigenbius

Shot 7

-¿¡Es en serio!? -Ruki hizo un escándalo cuando vio que cayó en las fauces de Shu al ser su pareja. Viendo como trató a Kou en su reto anterior le daba mala espina estar junto al mayor de los Sakamaki por tanto tiempo. Cuando entró y sintió el cerrojo puesto por Shu se escandalizó y retrocedió hasta que su espalda chocase con la pared, pero lo que más le sorprendió es que el rubio se sentase en el sillón y no tuviese segundas intenciones con él.

-¿Shu, no pretend-?

-No te confundas, Mukami. No tengo intención de acostarme contigo. Estoy cansado.

-Ya veo...

-Aunque creo que mejor momento que este no puede haber, ¿no? -Le mira- Podría apostar a que quieres hacerme varias preguntas sobre nosotros.

-No me interesa su familia ni sus relaciones familiares, pero si bien quisiera preguntar sobre....tus propias apuestas.

-¿Eh? ¿A qué te refieres?

-Sobre esta noche. Quiénes se emparejarían y qué tal reaccionarían en nuestra situación.

-¿Estás preguntando sobre a quiénes preferiría ver revolcándose en este sillón?

-Dicho de esa forma sucia, pues sí.

-Definitivamente no. No tiene sentido ni beneficio para ambos.

-No es cuestión de beneficio. Si ya de por sí las parejas han sido extremadamente raras, ponerse a pensar en fondo en la situación parece sucio pero intrigante.

-No hagas perder mi tiempo en esas tonterías. -Dicho esto, cerró sus ojos e hizo oídos sordos a su propuesta, al menos por un corto período de tiempo. Luego de pasados diez minutos antes de salir, Shu habló.

-Yuma.

-¿Qué dijiste?

-Yuma y Ayato...se han estado mirando. -le observa de reojo antes de que ambos tuviesen que salir- Si les toca, espero que tapes tus oídos.

-¿En serio crees en esa probabilidad?

-Pediste mi opinión, Ruki, y te la di. -Le dijo antes de salir con Ruki a cuestas.

-Oigan, eso estuvo demasiado silencioso. -comenta Laito.

-Apoyo al pervertido, no se escuchaba nada. -replanteó Subaru.

-Apuesto a que el vago se durmió.

-Cállense. Estaba cansado, además...no es mi tipo. -concluyó Shu.

-Si si~ lo que digas. -respondió Kou antes de dar vuelta nuevamente. Se tensó cuando la botella se dirigía hacia él, pero se alivió cuando terminó a su lado, osea, en Yuma. -Ara~ Yuma, te toca.

-¿Qué he hecho yo para merecer este desprecio? -exclamó Yuma.

-Bájale al AuronPlay, bro. -le respondió Ayato.

-¡Nunca! ¡Aurelio es vida!

-Chale.

-Bueno, quien acompañará al titán será....-Ayato dio vuelta y cayó en frente de su hermano Shu- Aish, yo quería gemidos de vieja, no de vago.

-¿Quién te asegura que el que gima vaya a ser yo, Ayato?

Cuando el mayor sentenció estas palabras, todos los presentes abuchearon a Yuma mientras decían cosas como "¡Te dijo pasivo, Yuma!", "¡La Yumaconda no es real!" o "Shu es un vago pero sabe moverse". Esto hizo que Yuma tomase aquello como reto personal.

-Claro que hay varias posibilidades: que gimas, grites o te retuerzas no cambia que vayas a ser el que reciba.

-Eso lo veremos, cariño.

-¡Uuuhhhh Shu ten cuidado!

-¡Ahora sí estarás cansado!

-¿Ves, Shu? Tus hermanos piden a gritos que grites que eres mío.

-Que digan lo que quieran. Ellos no te comerán.

-¡Ooohhh! ¿¡En qué momento esto se calentó tanto!? -chilló Laito.

-Desde que el vago no es vago.

-Bueno, chicos, lo demás deben hablarlo ahí dentro, así que muévanse.

Una vez dentro, Shu se volvió a sentar en el sillón a la espera del aviso de Subaru.

-Chicos, el tiempo empieza en 1...2..¡3!

Con la sola pronunciación del 3, Yuma ya había sacado del mueble casi levantando a Shu para pegarlo a la pared de un sólo empujón, a lo que suspiró por el leve dolor, pero sin poder decir más nada cuando el castaño devoró sus labios con rudeza, una que se manifestaría a lo largo de toda la penúltima ronda.

Continuará...