One-shots. [TamaBaku.]

⟨⟨🌸⟩⟩ Interaciones.

¿En qué momento pasó esto? ¿En qué momento comenzó a sentirse raro estando cerca de Amajiki? No lo sabía y no le importaba.

Ambos comenzaron a interactuar gracias a Kirishima y Togata... y Deku.

Aunque también se debía a Aizawa, y en menor medida, a Eri.

El adulto, muy pocas veces, dejaba al grupo de chicos a cargo de la pequeña niña, la cual prefería pasar el tienpo con Bakugō y Tamaki, ya que -a pesar de llevarse bien con los otros tres- estos eran más parecidos a ella.

Los cinco aspirantes a héroes se encontraban en la sala común de los dormitorios de la clase 1-A. Por lo que Bakugō -quien estaba sentado en uno de los sillones con sus piernas cruzadas- tenía entendido: Mirio estaba en el baño, Tamaki estaba con la niña, y Deku y Kirishima platicaban en la cocina. Trataba de tener un momento de paz, el cual se esmufó al ver al azabache junto a la albina.

── ¡Kacchan! ─le llamó la niña, seguramente Deku le habría enseñado ese apodo.

── ¿Ah? ¿Qué sucede mocosa? ─se sentó de una manera más cómoda.

Eri, un poco nerviosa, se sentó en el regazo de Katsuki, quien se limitó a suspirar.
Ambos notaron como el chico de tercer año se daba la vuelta y se alejaba lentamente.

── ¿Tamaki? ─el nombrado se detuvo al oír a la niña, para luego voltear a verlos.─, ¿ya te vas?

── Uh... creo que es momento de ir a... ya sabes... ─se trababa un poco al hablar, pero aún así se le entendía.─ ...ir a mí habitación.

Lo más probable era que el mayor estuviera solo una vez llegara a los dormitorios de tercero, digo, no creo que haya muchos alumnos que se queden un sábado por la tarde en la academia.

El rubio rodó los ojos.─ Si te vas a ir, vete de una vez.

── ¡Kacchan! ─reclamó la menor de los tres presentes.

Bakugō le dirigió la mirada a la chica por unos segundos, suspiró nuevamente.─ Y si te vas a quedar, siéntate de una puta vez. ─habló sin darse cuenta de lo que dijo.

Eri sonrió, pensó que el rubio correría de la sala al otro chico.

El mayor se sentó al lado de Bakugō; estaban en un sillón de dos lugares, por lo que quedaban un poco juntos.

La albina, aprovechando lo anterior, recostó una parte de su cuerpo sobre Tamaki, quién se dedicó a acariciarle el cabello.

Más o menos una hora después, Kirishima y Midoriya salieron de la cocina, se les hizo raro no haber escuchado ningún grito por parte de su amigo rubio.

Claro, ninguno de los dos esperaba ver a los tres chicos dormidos en el sillón; Katsuki tenía su cabeza recargada en el brazo -casi en el hombro- de Amajiki, y recostada sobre ellos se encontraba Eri.

Deku miró la escena sorprendido, ¿cómo era posible que Kacchan no se hubiera quitado? Reaccionó cuando escuchó el sonido de una cámara... o bueno, la cámara de un celular.

── ¿Kirishima-kun? ¿Qué...? ¿¡Qué crees que haces!? ─el peliverde trató de quitarle su celular al teñido, cosa que no funcionó, pero si hizo ruido.

── Blasty se ve tan tranquilo mientras duerme ─sentenció el pelirrojo.

── ¿Blasty...? ─la voz de la única niña, junto con un bostezo, hizo que voltearan a verla.

Eri bajó de las piernas de los chicos y se acercó a los otros dos.

── ¡Eri-chan! ¿Qué sucede? ─preguntó Izuku al ver que la chica parecía querer hablar o preguntar algo.

── ¿Qué es una puta? ─ladeó su cabeza en señal de confusión.─, Kacchan lo dijo hace rato... y Tamaki no le dijo nada; pero no sé que significa.

Ambos estudiantes se miraron entre sí, ¿qué se supone que le responderían?

── ¡Eri-chan! ─exclamó Deku con un notorio nerviosismo.─ ¡No... no deberías decir esas cosas!

Eijirō trató de contener su risa, sobraba decir que la niña estaba más confundida que antes.

Un poco después de que los demás se fueran de sala, Bakugō despertó; apenas estuvo más despierto que dormido se dió cuenta de que estaba aferrado, casi abrazado, a algo... o a alguien.
Se dió cuenta de que estaba sujetando con fuerza el brazo del chico de tercer año, quien tenía su cabeza recargada en la suya.

Se quedó quieto unos segundos, tratando de procesar la situación en la que estaba, sin soltarse del agarre del contrario.
Pero se confundió más al ver que la mano izquierda del mayor estaba entrelazada, por el dorso, a su mano derecha.

── Te mataré... ─susurró, tratando de no despertar a Tamaki...

Sacudió su cabeza repetidas veces, ¿por qué no quería despertarlo? Probablemente si Kirishima estuviera en el lugar del pelinegro no le hubiera importado despertarlo... nunca lo admitiría, pero el más alto se veía demasiado atractivo de cerca... y jodidamente adorable mientras dormía.

¿Quién diría que sería una de muchas interacciones cariñosas entre ellos dos?

One-shot que parece Drabble,, ª.
Es el cumpleaños de Bakugō uwu.
Ah,, ¿ por qué público este libro ? ¡ Porque no encuentro casi nada de ellos ! Y porque quería hacer algo en el cumple de mi bebé. 🐤💕
Es probable que más al rato suba otro con temática de cumpleaños.