9. En una tarde lluviosa dos corazones se encuentran

3.2K 188 6
                                    

Caminamos directo a mi casa, estábamos a escasos metros cuando de repente una lluvia torrencial azotó con fuerza, el sol se transformó de una manera instantánea, todo se oscureció, las nubes grises aparecieron cubriendo el azul del cielo y yo me q...

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Caminamos directo a mi casa, estábamos a escasos metros cuando de repente una lluvia torrencial azotó con fuerza, el sol se transformó de una manera instantánea, todo se oscureció, las nubes grises aparecieron cubriendo el azul del cielo y yo me quedé inmóvil, notando como todos a mi alrededor corrían intentando evitar el agua, lo cual era ilógico, nadie podía escapar de la lluvia. No me di cuenta que estaba acompañada hasta que su voz resonó en mis oídos.

— ¿No deberíamos correr? —dijo en broma.

Volteé mi rostro y le sonreí genuinamente, adoraba la lluvia, nadie podía arruinarme eso.

Negué con mi cabeza lentamente y cerré mis ojos mientras disfrutaba el contacto del agua cayendo en mi cuerpo. Todo en mi vida estaba cambiando porque permití que un hombre se metiera en ella, debí haber sido más fuerte, pero de mis errores aprendí una lección. Nunca hay que darle todo de ti a otra persona, no puedes dejar que sea tu única fuente de felicidad, porque cuando no esté quedaras perdida.

Mi felicidad giraba en torno a Cam, él rompía la monotonía de mi vida, sin él todo era prácticamente aburrido, no hacía nada interesante que no fuera con él, y ese fue mi error, ahora que ya no está mi vida vuelve a ser lo mismo día tras día.

La lluvia cada vez era más fuerte y me obligué a abrir los ojos. Thomas seguía a mi lado, observándome como si fuera un proyecto de ciencias. Gracias a la lluvia oculté las lágrimas que corrían por mis mejillas, le sonreí, no sabía por qué, pero lo hice.

Estaba dispuesta a empezar de 0, a intentar hacer mi vida más interesante, a disfrutar, la lluvia me había lavado el alma y quería iniciar de nuevo.

Thomas hizo un gesto con la cabeza dirigiéndose a mi casa y asentí, ambos caminamos normalmente por la lluvia hasta llegar a mi puerta.

Me quedé mirando el cerrojo, y luego volteé a ver la calle, la lluvia caía con más fuerza.

—Bueno, espero que te vaya bien Daniela —se despidió sin siquiera mirarme, sus ojos estaban puestos en la calle.

Aguanté el aire, todavía lo odiaba, me caía pesimamente mal, pero no tenía era tan malvada como para dejarlo ir con esa lluvia.

— ¿Quieres entrar? —solté sin más, esas palabras me costaron mucho. Thomas frunció el ceño—, a menos de que quieras irte en plena lluvia caminando a tu casa, por lo visto no traes tu carruaje —dije de manera grosera.

Él solo asintió.

Abrí la puerta y subí las escaleras mientras escuchaba como se cerraba la puerta de la entrada detrás de mí. Llegué a mi piso, me dispuse a abrir la puerta y entré a mi apartamento seguida por Thomas.

Thomas se quedó observando mi pequeño hogar y me dio mucha rabia. Esto era nada comparado con lo que él tenía, así que estaba esperando alguna burla de su parte, solo necesitaba un incentivo para echarlo.

Corazones cruzadosWhere stories live. Discover now