♡16- Relación entre hermanos.♡

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Luego de haber almorzado con mi novio, - aun me encanta presumir - volví al escritorio a terminar de revisar unos papeles. Hace una hora salí del trabajo, pero me encuentro en la oficina de Noa, esperando a que él termine de programar unas reuniones para la semana que viene, para irnos juntos a nuestras casas.
Así que me encuentro en un sofá pequeño pero cómodo, enfrente del escritorio de Noa.

He estado pensando mucho el desarrollo de mi libro, y creo que lo mantendré oculto por ahora. Me he dado cuenta que aún le faltan algunas cosas por completar. Aún soy joven y me queda mucho más por vivir y descubrir.

Durante estos cinco meses con Noa, descubrí que todos me estaban complaciendo y distrayendo de muchas formas. Resulta ser que mi padre habló con un psicólogo sobre un trauma o algo respecto a eso. Aun así estoy feliz, unos meses de duelo no le hacen mal a nadie. Y aunque aún me duele, lo sé llevar mejor.

Además... Le hice una promesa a mi madre.

Mis pensamientos triunfadores patea vagos de diestra a siniestra son interrumpidos por mi celular.

Lo saco de mi bolsillo y lo observo extrañada; no es un número registrado.

Decido levantarme, Noa levanta sus ojos del computador y me dedica una mirada confundida. Le enseño mi celular y salgo de la oficina apresuradamente para contestar.

—¿Aloh?

—¡Buenas tardes! ¿Hablo con la señorita Charlotte Pearce? —se escucha la voz de una mujer en la otra línea.

<<Señorita Alteza lectora empedernida mastodonte para ti, mi ciela>>.

Por Dios, esto es de tanto estar con Adeline y Shenara.

—Sí... ¿Con ella habla? —sonó más a pregunta.

Apoyo mi espalda en la puerta de la oficina y dirijo mi mano a mi mentón, para morder la uña de mi dedo pulgar.

—¡Hola, Buenas tardes! —saluda entusiasmada— Charlotte, yo soy la secretaria Margaret del señor Jason Mendler, de la editorial Mendler —me inquieto de inmediato al escuchar la editorial—. Sabemos de antemano que el día de las elecciones de los empleados será el día de mañana. Pero a petición de Mendler y los que se dedican a las entrevistas, les ha llamado mucho la atención de su muestra del libro en el que está trabajando. A parte de su currículum y su interés por trabajar con nosotros; queremos contratarla. Su entrevistador a quedado complacido, y su muestra ha ido hasta las manos del mismísimo señor Mendler. El pago y horario se lo diremos en cuanto se presente y el señor Mendler quiere su presencia de inmediato. ¡Felicitaciones!

Quedo estupefacta. ¿Lo dijo enserio?

¡SI ES UN SUEÑO, QUE NADIE ME PELLIZQUE!

Chloe pasa por mi dirección, frunciendo su ceño con cara de "¿Qué le pasa a esta loca?".  Aunque al momento me ignora y continua caminando.

—¿De v-verdad? —aclaro mi garganta— Estaré muy complacida de trabajar con ustedes y daré mi mejor esfuerzo, ¡lo prometo! —hago una pausa— ¿Cuándo es que inicio?

Justamente pasado mañana. No queremos alarmar a los demás entrevistados, o que se enteren de que uno en especial tuvo un puesto. ¿No es molestia?

—¡No! ¡Claro que no! Ahí estaré.

Muy bien, Charlotte. Fue un gusto hablar con usted, espero conocerla en cuanto venga, tenga un buen día. —antes de responderle, cuelga.

Okay, respira profundo... ¡Y date cuenta que no es un sueño!

¡Mamá! ¡Los sueños sí se cumplen! Solo es cuestión de esfuerzo y tiempo.

A book behind you 2: A heart.Where stories live. Discover now