Capítulo 1🎆

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"Just one year of love
Is better than a lifetime alone
One sentimental moment in your arms
Is like a shooting star right through my heart
It's always a rainy day without you
I'm a prisoner of love inside you"

One year of love - Queen
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Ha pasado un año desde que Anne y Tyler se casaron. Son realmente felices uno al lado del otro, "son todos unos románticos" como dicen sus amigos.

Habían quedado en que hoy irían a la playa a ver el atardecer juntos, tomados de la mano cómo solían hacer.

-Hola Tyle -dijo Anne subiéndose al auto

-Hola preciosa ¿Lista para ir?

-A dónde sea mientras sea contigo -sonrió por lo que su esposa acababa de decir, "su esposa", incluso después de un año le parecía extraño llamarla de esa manera. Seguía sin creer cómo es que él estaba con una mujer perfecta como ella

Arrancó el auto y comenzó a conducir. Anne le subió el volumen a la radio y bajó la ventanilla del auto, había comenzado a sonar "Sweet Child O'mine" de los Guns N' Roses, uno de sus grupos favoritos. Luego sacó su cuerpo por la ventana y se sentó en la puerta del auto, quedando sus manos sobre el techo. En estos momentos se sentía la mujer más feliz del planeta, sentía que se podía llevar al mundo por delante y que junto con ella estaría su mundo, su esposo.

Percibía el viento en cada centímetro de su cuerpo, por sus oídos entraba, según ella, una de las mejores canciones de la historia, junto con otra melodía: la risa del pelinegro. Lo amaba con cada partícula de sus ser, él había estado cuando nadie más lo hizo, la entiende y conoce como ningún otro, la ama y aprecia como nadie más.
Sentía su corazón llenarse de vida, de felicidad y necesitaba expresarlo:

-TE AMO TYLER BROWN, CON TODA MI ALMA -gritó al viento con los brazos extendidos y la cabeza hacia atrás, luego sintió al nombrado reirse

-Entra que ya llegamos -ella obedeció, pero no se sentó sin antes darle un beso

Se bajaron del auto sin descargar nada de lo que habían traído y corrieron al agua. Extrañaban ese lugar. Ahí se encontraban a ellos mismos, encontraban la paz y tranquilidad, la felicidad, el amor.
Se quedaron en traje de baño y tiraron las zapatillas y la ropa por ahí, más tarde se preocuparían por eso. Entraron al agua, se abrazaron y se besaron, encontrando al otro en lo más profundo de su ser y su conciencia.

Ante el otro estaban desnudos, transparentes. No sé ocultaban cosas, no había por qué hacerlo. Eran ellos mismos y eran únicos. Compartían muchísimas cosas, pero más que nada compartían esa forma de ver al mundo, como un lugar hermoso lleno de vida y amor, que aunque a veces te pueda hacer sufrir y sentirte una completa basura, a veces te regala personas que te dan vuelta todo y te llenan de felicidad. A veces es esa misma persona la que te termina haciendo mierda cuando se va, pero los recuerdos de todo lo que vivieron juntos se quedan y permanecen imborrables en los corazones.

-Sigo sin poder creer que estés a mi lado

-Sigo sin poder creer que seas mi esposa -ella rio suavemente a lo que él sonrió y volvieron a encontrar sus bocas- Amo el sabor de tus labios, simplemente no puedo sacarle de ellos -agregó

-Y yo te amo a tí -lo observó reír malicioso- Oh no, Tyler ¿Que harás? -dicho esto se dejó caer, cayendo ambos al agua provocando que ambos rían. Se levantaron y comenzaron a salpicarse agua cual niños

-Hey mira -el de ojos marrones captó la atención de la menor- ya va a ponerse el sol

Salieron del agua y se sentaron en la arena él quedando detrás de ella rodeándola con los brazos. Estaban en silencio, apreciando al disco solar bajar lentamente y proporcionarle al cielo tonos naranjas, amarillos y rosados al cielo. Él apoyó la cabeza en el hombro de Anne.

-¿Cómo es posible que los atardeceres existan? Son cosas tan hermosas que ocurren todos los días, increíble ¿No? -expresó la castaña asombrada. Tyler amaba la forma que tenía de apreciar las cosas, no entendía cómo es que podía admirar la vida y el mundo de tal manera después de todas las cosas por las que tuvo que pasar

-Tú eres mi atardecer -le susurró en el oído para luego depositar un suave beso en su mejilla

No volvieron a hablar hasta que el sol se ocultó por completo

-Tyle, tengo que decirte algo

-¿Que ocurre? ¿Te encuentras bien?

-Deja de preocuparte, son buenas noticias -el pelinegro dejó de tensar su cuerpo y sonrió

-Ya dime de una vez, me matas con la intriga

-Cariño, estoy embarazada



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Soy una romántica asquerosa, fin del comunicado

(Espero les guste<3)

Lo que en mí dejaste Where stories live. Discover now