20.HOGAR DULCE HOGAR.

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No creo que exista algo más bonito que coincidir con una persona que sienta lo mismo que tú ". -Héctor. C. Alcívar.

Iban a ser quince largas horas, solo esperaba no encontrarse con alguien más en el aeropuerto...

Abordaron el avión y todo estuvo tranquiló, Fabiola una vez más durmió durante casi todo el viaje y Astrid se la paso pensando demasiado en lo que estaba sucediendo no sabía si había sido la mejor decisión, pero ya no había vuelta atrás, todo estaba hecho, estaba triste por no haberse despedido de Dylan, pero creía que era lo mejor, no quería encariñarse, solo era una semana y todo iba a terminar, nunca más lo volvería a ver, eso solo fue coincidencia.

Después de quince horas largas llegaron a su destino, estaban muy cansadas, en cuanto salieron del aeropuerto decidieron que lo mejor era ir a casa de Astrid, llegaron y se metieron a la cama, el vuelo había sido demasiado largo y estaban muertas de cansancio.

Al día siguiente se despertaron tarde y platicaron con la mamá de Astrid de cómo les fue, pero obviamente evitaron decir lo que paso en día antes de su regreso, después de unas horas salieron a comprar cosas para su pijamada.

Regresaron a eso de las ocho y prepararon palomitas, gomitas, botana, refrescos, chocolates, entre otras cosas, empezaron a divertirse, a comer, maquillarse entre ellas y contarse cosas, la pasaron genial, todo fue muy divertido, al día siguiente repitieron lo mismo, pero en esta ocasión Fabiola decidió que era buena idea llevar alcohol y comenzaron a tomar, la mamá de Astrid no estaba, así que hicieron una mini fiesta entre ellas.

Todo iba bien hasta que se pasaron de tragos, estaban demasiado borrachas ya, en eso se escuchó un teléfono, era el de Astrid, ella empezó a hacer señas de que guardara silencio y le bajara a la música.

-Bueno

-Astrid, ¿dónde estás?, estoy muy preocupado por ti

-Y ¿tú quién eres?

-Soy Dylan, ¿estás bien?

-O ya Dylan el idiota

-¿Estás borracha?

-Eso no te incumbe

-Por favor déjame hablar contigo, ¿en dónde estás? Voy a buscarte

-Sí, ya no estoy en Ibiza

-¿Qué, como que no estás?

-No te escucho se está cortando pi pipi

Y colgó.

Empezaron a reírse como locas, ahora la que se estaba comportando inmaduramente era ella.

-No quiero saber nada de el

-Entonces vamos a bloquear su número

-No espera

-Si mira es lo mejor

Fabiola le arrebato el teléfono y elimino el número de Dylan.

-Listo

-Que siga la fiesta-

Siguieron tomando, lloraron por cosas tontas, y se durmieron mucho más tarde que la noche anterior, había sido pésima idea, se despertaron y agradecieron que su madre no llegara, se pusieron a levantar todo, y después prepararon comida, hasta ese momento no se acordaban de lo que habían hecho.

*PERSPECTIVA DE DYLAN*

(El día de la fiesta: Ibiza)

Estaba mocionado por ver nuevamente a Astrid, así que decidió que era buena idea ir a buscarla, pero no sabía su número de habitación, así que pensó en ir a recepción a preguntar por ella, pero no funciono como esperaba.

El Repentino Desastre De AstridWhere stories live. Discover now