Capítulo IV

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Mi corazón se empezó a acelerar al ver a mí hermana en esa condición, sin pensarlo dos veces me acerqué rápidamente al cuerpo de mi hermana, toque su rostro y estaba ardiendo.

— Emily... ¿Qué te han hecho...?

En eso los ojos de mi hermana se abrieron un poco y dirigió la mirada a mi dirección.

— Volviste... Sabía que estabas aquí... — Dijo mi hermana con una voz débil.

— Hermana... Todo estará bien, solo sigue conmigo por favor...

Después de decir esas palabras mi hermana cierra sus ojos nuevamente.

— ¿¡Emily!?

Pongo mi mano cerca de su nariz para verificar que respiraba...gracias a dios sentí el aire como salía y entraba de su pequeña nariz. Rápidamente voy al armario y agarro una toalla para luego cubrir el cuerpo desnudo de mi hermana para después agarrarla de brazos.

— ¿Tyler podrías explicarme qué le ha pasado a tu hogar? — Dijo Natalie mientras observaba dentro del departamento.

— ¡NATALIE LLAMA A LA AMBULANCIA AHORA! — Exclame mientras salía de la habitación con el cuerpo de mi hermana en brazos.

— ¿Q-que le ha sucedido a tú hermana? — preguntó Natalie con una voz temblorosa.

— ¿¡Acaso eres estúpida!? ¡Te dije que llames a una ambulancia!

— P-perdóname ahora mismo saco mi teléfono — En eso Natalie abre el bolso que llevaba consigo, saca su teléfono y empieza a marcar por ayuda.

Mientras Natalie hablaba por el teléfono, observaba el pálido cuerpo de mi hermana, sus latidos eran débiles, no pude evitarlo y unas cuantas lágrimas salían de mis ojos por la desesperación.

— Ya están en camino, por favor relájate... — Dijo Natalie mientras se acercaba a mí

— ¿¡Cómo quieres qué me tranquilice si mí hermana está así!?

— Lo siento pero es que... No entiendo que esta sucediendo... — Después de esas palabras a Natalie le empezaron a salir lágrimas de los ojos.

¿Qué me sucede?

— Perdón por hablarte así, no fue mi intención.

— Comprendo como te has de sentir... — Natalie empieza a quitarse las lágrimas con su brazo.

— Si quieres podemos sentarnos en el sillón para relajarnos un poco mientras llega la ayuda.

-

— Me parece bien...

Natalie y yo procedemos a sentarnos en el sillón, nos quedamos en silencio, yo seguía sujetando a mi hermana en brazos, algunas veces pasaba mi mano cerca de su nariz para confirmar su respiración; unos cuantos minutos pasaron y llegó la ayuda, bajamos la escaleras, ví a mí hermana siendo acomodada en una camilla por los paramédicos.

— ¿Quiénes son los familiares? — Preguntó un paramédico.

— Solo yo señor.

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⏰ Ultimo aggiornamento: May 22, 2021 ⏰

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