Nuestro secreto

Capítulo 21

Gabriel Agreste se dirige a Nueva York por un asunto "familiar", esta vez esta acompañado de su hijo Adrien. Normalmente Adrien estaría preocupado de dejar París, pero ahora que hay más héroes disponibles en París se siente más relajado porque confía en los otros héroes.

—Lamento haber programado este viaje de último momento, hijo. Pero es de suma importancia atender este asunto familiar— dijo Gabriel.

—Descuida padre, lo entiendo. Será bueno volver a Nueva York, con eso de que la última vez me fui temprano— señala Adrien.

—Solo que esta vez nos hospedaremos en un hotel— dijo Gabriel.

—¿Por qué no nos hospedamos en la casa de la tía Amelie? — pregunta Adrien.

—Por un cierto problema que no quiero mencionar— responde Gabriel.

—Como sea, de nada sirve preguntar— expresa Adrien— Aunque fue bueno de tu parte haber invitado a Luka.

—¿A quién? — pregunta Gabriel.

—A mí, he estado sentado detrás de usted desde que abordamos el avión privado— señala Luka.

—Ah, es cierto, te había olvidado— señala Gabriel— No te sientas cómodo, solo te invité por petición de Felix.

—¿De Felix? — preguntan Adrien y Luka.

—Sí, para resolver el asunto familiar, Felix accedió con la condición de que invitara a tu maestro de guitarra— explica Gabriel Agreste.

—Oh, eso es raro— expresa Adrien.

—El honor de la familia esta en juego, Adrien. No importa el precio, todo debe salir bien— señala Gabriel tocando el hombro de su hijo— Ahora, tengo que resolver unos detalles de organización.

Gabriel se pone de pie para irse a una habitación que estaba al final del pasillo. Luka aprovecha para sentarse en el asiento donde estaba Gabriel para estar más cerca de Adrien.

—Nunca cambiara— expresa Adrien deprimido.

—Eso no es verdad, al menos me invito— señala Luka.

—Pero solo te invito por petición de mi primo Felix— señala Adrien.

—Tal vez, pero el lado bueno es que podré pasar tiempo contigo en Nueva York— señala Luka.

Adrien sonríe tras escuchar eso. Como el guardaespaldas esta atrás escuchando música relajante, tratan de no hablar mucho de sus vidas de héroes, incluso sus kwamis permanecen escondidos.

Llegan a la mansión de la tía Amelie quien recibe con brazos abiertos a su sobrino Adrien. Gabriel se mantiene firme y con gesto de amargura. Luka sostiene su guitarra viendo todo a su alrededor.

—Tú debes ser Luka— dice Amelie acercándose a Luka— Mi hijo me ha hablado mucho de ti.

—No creo que sea necesario decírselo, madre— dice Félix quien iba bajando de las escaleras. Al llegar abajo, él y su tío cruzan miradas de odio— Saludos, tío.

—Saludos, Felix— dice Gabriel sin siquiera extenderle la mano.

—No has cambiado en nada— dijo Felix.

—Lo mismo digo— dijo Gabriel.

Ambos siguen viéndose con odio amargando el ambiente hasta que Amelie interviene.

—Felix, querido hijo, ¿Por qué no les enseñas a tu primo y a Luka donde dormirán? — le dice Amelie.

Felix obedece y lleva a los chicos a sus habitaciones. Luka esta sorprendido, él esta acostumbrado a compartir su cuarto con su hermana, por lo que tener una habitación grande para si solo es algo sorprendente.