Tu Alma y La Mia

Capitulo 34

James alcanzó a Severina solo para sentir frías sábanas vacías bajo las yemas de sus dedos. Apretó su mano alrededor de ellos y sintió que el dolor de la pérdida subía y se hinchaba hasta su garganta. Acercó la almohada a su pecho y se preguntó cuántas veces más podría llorar antes de que su corazón simplemente se rindiera.

Su ausencia era como un enorme agujero en medio de su pecho. Como un miembro fantasma, su alma trató de latir con vida solo para descubrir que perdía una parte vital de sí misma. James no podía imaginar un dolor mayor que este.

Odiaba a ese bastardo. Lo odiaba por robarla, pero por mucho que odiara a Tom Riddle, se odiaba a sí mismo mil veces más. Le falló de nuevo. Él no estaba allí cuando ella lo necesitaba. Emborracharse con un partido de Quidditch, ¡un puto partido de Quidditch! ¡Debería haber estado allí!

Los Aurores tenían una ventaja la mañana después de que la capturaran. Un comerciante del Callejón Diagon que vivía encima de su tienda había escuchado algo de conmoción en el Callejón y miró por la ventana. La encargada de la tienda dijo que vio a un mago y una bruja luchando por una varita, la bruja parecía llevar una túnica de Hogwart y ambos tenían el pelo oscuro, pero esa fue la extensión de la descripción que pudo dar. Ella dijo que desaparecieron rápidamente y que solo había sido un vistazo. La razón por la que llamó a los Aurores y la razón por la que James se despertaba la mayoría de las noches era que el testigo dijo que podía ver claramente la mano del mago alrededor del cuello de la bruja.

James se atragantó con el aire, sollozando. Ella estaba bien? ¿La estaba lastimando? Oh, dioses ... ¿lo era? ¿Y si él fuera ...

La puerta de su habitación se abrió con un crujido y la suave luz de un lumos llenó el umbral.

"¿Jaime?" Remus preguntó suavemente. Los Lupin vinieron para quedarse el verano con los Potter y Remus escuchaba a James llorar hasta quedarse dormido y luego se despertaba y volvía a llorar. Durante el día, James estaba resuelto y concentrado en recuperar a Severina, pero cuando al final de cada día ella todavía no estaba, James se desesperaba. El corazón de Remus se rompió por él.

James se sentó en su cama pero solo gimió lastimosamente en respuesta a su amigo. Las lágrimas todavía llenaban sus ojos y le dolía demasiado para abrirlos, pero sintió que la cama a su lado cedía bajo el peso del otro y un brazo se envolvía alrededor de sus hombros.

Remus habló con lágrimas en su voz, "Lancé un hechizo de privacidad". Apretó sus hombros, "déjalo salir, James".

Permiso para llorar e irónicamente todo lo que hizo fue calmarlo. Deseó poder. Deseaba poder dejarlo salir y estar mejor, pero el problema con el llanto y el problema con toda esta situación era que Severina se había ido y ¡ Él la tenía!

"Remus, ¿qué pasa si él ... y si se está imponiendo a ella? ¿Qué pasa si la está torturando o no lo sé... no lo sé... no puedo dejar de pensar en todas estas cosas horribles? Todas las noches, no puedo dormir porque cada vez que cierro los ojos mi mente repasa todas las peores cosas posibles que él podría estar haciéndole '.

James se llevó las manos a la cabeza. —Nadie la ha visto desde la primera mañana que había desaparecido. El tendero ... dijo que vio a un hombre con la mano alrededor del cuello de un estudiante de Slytherin. Ella estaba luchando contra él, estaba tratando de escapar. ¿Y si la está lastimando?

"¿Por qué la tomaría solo para lastimarla?" Remus preguntó preguntándose por la posibilidad él mismo.

"¿Porque ella le dijo 'no', porque lo rechazó? Hubiera sido más misericordioso si nos hubiera matado a los dos en la boda en lugar de esto. Remus, duele. No puedo explicarlo ... Se siente como si me hubiera arrancado el corazón y sigue tratando de latir, pero en lugar de la vida, bombea ... dolor. Ha sido una tortura todos los días desde que se fue. ¿Crees que ella también sufre así? "