3- Consejo Inesperado

22 10 1
                                    

Hoy recibí uno de los mejores consejos de toda mi vida, y no trata de nada más allá que de un simple pero a la vez profundo mensaje de texto.

En ocasiones somos sorprendidos por ese amigo al que en ciertos momentos descuidamos, quizás no lo hacemos de forma intencional pero a fin de cuentas pasamos de él, no sé, prácticamente lo dejamos en el banquillo de espera por un tiempo remotamente prolongado.

Mi caso no es el de ese típico mejor amigo de toda la vida, de hecho es un poco curioso porque nos conocemos tan solo hace cuatro años aproximadamente y hablando con la mano en el corazón no creí o al menos no me esperaba un gran consejo por su parte, de hecho me hizo replantearme tantísimas cosas, incluso me emocioné porque fue concreto, directo, me dio su punto de vista y sobre todo me habló con educación que es algo que muchos de nuestros "amigos" no entienden aún, a veces para dar un consejo no es para nada útil seguir esa línea de ofensas a la que a veces nos acostumbramos, osea hoy en día se deberían de enfrentar los problemas con educación, tranquilidad y paciencia o al menos intentarlo antes de recurrir a la violencia, detalle del cual muchos no han aprendido todavía.

Bueno, mi amigo y yo tuvimos una conversación bastante típica, cosas de amigos por así decirlo. Le estuve comentando los problemas... y digo "problemas" porque en realidad ahora que veo todo con más claridad me doy cuenta de cosas que antes no veía, me escondía en la excusa de que no había encontrado el amor porque nadie tenía la capacidad de entenderme, de comprender mis actos, de quererme por como soy, con mi paquete entero de defectos, con mis quejas y angustias. Una y otra vez me dejaba llevar por mis miedos, esos que me cegaban y de una extraña forma no me dejaban ser feliz. Ahora que lo descubrí entendí que nunca fui yo y nunca lo pude ser, no diré que no lo intenté porque si lo hice y quizás solo no arriesgué y tan solo siempre me mantuve en esa cómoda ''zona segura'', ahí escondido donde nada me podía afectar, donde era más sencillo fingir que todo estaba bien a tener que enfrentarme y tomar decisiones en mi vida. Comprendí que las caídas duelen pero a la vez nos enseñan y hoy en día por cada situación difícil se aprende, no todo es tan malo como parece, por miedo al fracaso estoy solo, dejé ir a personas maravillosas, personas dispuestas a quererme o al menos así lo expresaron. Y de nada sirve quedarse de brazos cruzados y ver desde nuestro balcón cómo pasa el tiempo, como cada día todos van encontrando su alma gemela y tú ahí solo, por miedo a intentarlo y fracasar.

Obviamente es una lección aprendida, intentaré ser más transparente cada día, dejaré los miedos a un lado e intentaré ser más consiente de la realidad que vivo sin importar temer un fracaso sentimental, a fin de cuenta no será una nueva extraña y trágica historia de amor, de hecho entendí que estaremos tropezando una y otra vez hasta que la vida misma nos ponga en nuestras manos a la persona adecuada.

Mi Propio Infierno (parte 3) [COMPLETA✔]Where stories live. Discover now