Desconocidos [✔]

Capítulo 10

Hoy era el día.

Hoy era el día en el cuál íbamos a conocer al ganador final. Era algo que nos ponía tensos a todos, pero a la vez muy felices y emocionados. Hoy no habría clases ya que se suspenden para los preparativos del partido.

Matt estaba desayunando como un loco, decía que "debía tener todas las energías posibles", aunque en realidad sabía que el solo tiene un buen apetito, reí al pensar eso y sonreí ver a mí hermoso novio desayunar como un salvaje.

Al cabo de un rato se escucha que abren la puerta, claramente eran los padres de Matt.

—¡Estamos en casa!— Su madre gritó desde la entrada.

—¡En la cocina!— Matt gritó con la boca llena de comida.

Él se levantó corriendo a abrazar a sus padres quienes le devolvieron el abrazo muy cálidamente. Sonreí ante tal escena, sé que el los extraña mucho.

—Mí Nicholas— Alexandra, su madre se acercó a mí y también me abrazó.

—¿Cómo estás Álex? Ha pasado un tiempo— sonreí.

—Exhausta, ya sabes, trabajo aquello, trabajo lo otro, muy cansada— suspiró y me dedicó una sonrisa.

—¡Nicholas!— El padre de Matt se abalanzó sobre mí también dándome un fuerte abrazo.

—¡Leonard!— acepté su abrazo.

—Gracias por cuidar de Matt, sé que contigo estuvo en muy buenas manos— Dijo Leonard y sonrió junto con Alexandra.

—En realidad, fue Matt quien cuidó de mí todo éste tiempo— reí y abracé a mí novio.

—Nos cuidamos mutuamente— Matt sonrío y me miró.

—¡Ah! El amor joven— Álex sonrió tan encantadora como siempre—. Bueno, vístete Matt, iremos a relajarnos antes del partido, te hará bien, ¿Te sumas Nico?

—Oh no, pasen tiempo ustedes, yo tengo algunas cosas que arreglar antes del partido también— sonreí.

—Bueno, en ese caso nos veremos allá entonces— Mencionó Leonard.

—¡Por supuesto!— saludé a los dos mayores y me despedí de Matt con un beso.

Tomé mis cosas y me dirigí rumbo a casa, debía dejar que Matt pasará tiempo con ellos y se pongan al día. Lo ayudará a distraerse del partido.

Llegué a mí casa y saludé a mis padres, Ethan se encontraba jugando a la consola de videojuegos de la sala, decidí molestarlo un poco poniéndome frente a él.

—¡NICHOLAS ES EL JEFE FINAL, HAZTE A UN LADO AHORA MISMO!— gritó desesperadamente que accedí a que viera la pantalla.

—Ese jefe es muy fácil— mencioné.

—Porqué tú lo jugaste en fácil, esto es modo infierno— dijo apretando rápidamente todos los botones.

Reí y decidí dejarlo solo. Subí a mí habitación y dejé preparadas algunas cosas en mí mochila, tales como la pintura, un silbato para hacer ruido y dos pompones, uno de color violeta y el otro de color blanco. También debía preparar la ropa que usaría, ya que al acabar el partido, ganen o pierdan, iremos todos a festejar a casa de Matt, algo chiquito y normal, luego sí se vendría la gran fiesta.

Opté por ponerme unos jeans claritos junto con una remera con franjas rosadas, blancas y celestes, unas zapatillas completamente blancas y de abrigo una campera completamente celeste. Y así quedó mí outfit para el partido, lo dejé preparado y me metí a bañar.