Tu y yo en Kimetsu no Yaiba [Mujeres]

Capítulo 15

—¡Aquí!

Junto a ti, alguien que se había unido al grupo te llama.

—Entendido, no se separen mucho.

Tres personas corren en dirección a un demonio.

Contigo ya eran cerca de 15 personas, 16 contándote.

Y te tocaba comandarlos.

Esto cansa...

Piensas al tiempo que miras al demonio desaparecer.

El aliento que intentabas usar por alguna razón no funcionaba bien, causando que llegaras tarde a los asaltos grupales.

Era recién la primera noche, pero la fatiga mental era muy extenuante.

—¡Uno por aquí!

—¡Aquí!

—¡!

Ahora eran 15.

Durante toda esa noche pudiste ver morir a 5 personas de las 16, 15 sin contarte.

Te causaba nauseas, te daba... de todo, pero no podías desfallecer.

—¡Me he hartado!

Una chica, no era Aoi o nadie que conocieras de antes, se levanta gritando.

—¡Un tercio ha muerto! ¡No me quedaré!

La primera "revolución" llevó consigo a ocho personas.

Quedando solo tú, Aoi y otra chica llamada Teiko, Hana Teiko.

Ella era bonita, su pelo era levemente rojizo y de un color grisáceo claro.

Lo más bonito eran sus ojos naranjas-dorados.

Ella se desenvolvía muy muy bien con el aliento de las flamas, aunque decía no conocer a ningún Rengoku.

Una vez expuestas al sol de madrugada, las tres caen muy cansadas.

—Lo siento... lo siento...

Aoi empezó a sollozar.

—No te preocupes, Aoi-chan.

Acaricias la espalda de la chica que estaba hecha bolita.

—Lo importante será sobrevivir, ¿verdad, Hana-san?

Los ojos naranjas de la chica voltean a verte por un segundo, asiente y sigue mirando al bosque del alrededor.

—Duerman.

Estabas muy cansada, así que al oír a la más fuerte del grupo decir eso, solo puede sonreír.

—Yo...

Aoi intenta ponerse de pie, pero es detenida por el dedo índice de Hana.

—Duerme.

Sus ojos filosos asustan bastante a Aoi, quien asiente y se recuesta en el suelo.

Ahora esos ojos dorados te observan.

—Dormiré, muchas gracias, Hana-san.

Ella asiente.

Suspiras y luego de acercarte a Aoi, caes dormida.

[ · · · ]

Inicio de la segunda noche.

Hana las había sorprendido a medio día haciéndoles algunos almuerzos, con lo que podían encontrar en la montaña.

—Hana-san ¿Estás segura de continuar? Dormiste bastante poco...

Quizás habría dormido unas cuatro horas.

Pero Hana asiente.

—Estoy bien.

Aoi temblaba levemente, además de sudar un poco.

—Bien. Sobrevivamos una noche más.

Sonríes un poco, aunque era difícil hacerlo mientras pensabas en los demonios contra los que lucharías.

Caminan durante un rato, asegurándose de no encontrarse con otros demonios.

Pero, de repente Hana parecía inquieta.

—¿Hana-san? ¿Sucede algo?

Aprietas la katana que tenías en tus manos y viras hacia ella.

—Algo... muy feo, hay algo feo.

Ella empuja a Aoi hacia ti, al mismo tiempo una mano cae del cielo en donde antes estaba la de ojos azules.

Hana actúa rápido y corta mano, al tiempo que distingue desde donde venía.

¿Mano? ¿Una mano? ¡El demonio verde que Tanjiro asesinó!

Aprietas tus dientes.

Sabito y Makomo murieron contra él. Seguro no podrías hacer mucho.

—Huyan.

Hana se para frente a ambas y corta otras manos que venían contra Aoi y contra ti.

Sin embargo, no logra cortar una que la manda a volar y causa que se estampe contra un árbol.

Ella reacciona rápido y rueda por el árbol y el suelo, para luego saltar nuevamente frente a ustedes.

—¡Lárguense!

—¿Sae-chan?

Aoi te mira, preguntándose qué hacer.

Quedas congelada.

Solo fue un segundo.

Pero fue suficiente.

Puedes ver una mano salir del suelo y otra caer del cielo.

Aoi fue destrozada.

Hana, quien estaba frente a ella es asaltada por las mismas manos y otras más. También muere.

Y tú.

Por no ir a lo seguro.

Mueres.

[ DIED ]

TU Y YO EN KNY

Preguntas del capítulo 14.

[ ¿Buscarás más personas con las que asociarte, o solo con Aoi? ]

Importancia: Enorme.

A.  Sí.

B.  No.

C.  Si las encuentro, sí.

[ Ahora estás en la selección Final, si fallas, mueres. El último Checkpoint fue al inicio del capítulo. ¿Qué aliento usarás? ]

Importancia: Extrema.

A.  Aliento de las flores

B.  Aliento de la flama

C.  Aliento del amor

D.  Depende de la situación.

E.   El que mejor domine.

F.   Nuevo aliento sin nombre.