Shen Yuan despierta en una base espacial desierta... o bueno, casi desierta. Su única compañía por cuanto sería un periodo indeterminado de tiempo es esta persona llamada "Binghe". Un chico que pareciera haber sido esclavo de los piratas espaciales...
"¿Qué hay sobre ti, Connor? Te ves humano. Suenas humano. Pero, ¿Qué eres realmente? " (Detroit: Become Human, 2018)
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Tratar con Shen Jiu, a veces se sentía como caminar sobre cáscaras de huevo.
Tratar con Binghe, para su sorpresa, siempre se sentía como caminar sobre césped recién cortado.
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El día es especialmente frío. Según las palabras de Binghe, son los días más fríos del año en la base espacial, así que deciden tomarse un descanso de una semana. Shen Yuan teme que su nariz se congele y se caiga mientras Binghe maneja, por lo cual, quedarse en casa es la mejor opción.
Es curioso en realidad, ahora que se da cuenta, no han tenido ningún momento de descanso desde que Shen Yuan llegó a la base. Bueno, él tuvo tres semanas de sueño involuntario en las que Binghe tuvo que cuidar de él y algo lo suficientemente vergonzoso como para no querer pensar nuevamente en ello. ¿Cómo es que estaba tan limpio y con ropa nueva luego de tanto tiempo? ¡No iba a pensarlo!
Ya habían pasado dos meses y en esos dos meses, Shen Yuan jamás se había tomado el tiempo para explorar su nueva casa debidamente. Era un modelo simple, dos pisos más un subterráneo. Un total de cinco habitaciones, más un baño, una cocina y un invernadero que Shen Yuan había visto de paso sin entrar jamás.
Esta era la ocasión ideal para iniciar su plan para ayudar a Binghe. El día anterior había sido desastroso, por lo cual había aprovechado el desayuno para tantear el humor del otro humano. Fuera de quedarse ensimismado observando sus propias manos, Binghe parecía tan normal como otros días. Una semana. Siete días. Shen Yuan era pésimo tratando con la gente, en serio tenía muy poca experiencia. Pero sabía que era ahora o nunca el momento para jugar sus cartas, después sería demasiado tarde.
Así que aprovecha el momento después del desayuno para acercársele, mientras el otro se encarga de recoger la mesa y llevar los trastes al lavavajillas. En serio, había cosas demasiado viejas en esta base.
— ¿Cuál es tu bebida favorita, Binghe? —pregunta con una tranquilidad que esconde un terror enorme a desatar una nueva crisis. Es una pregunta que está seguro, no se han hecho antes. Así que reclina contra el borde de la mesa mientras observa la figura de Binghe detenerse un momento, de espaldas a él.
Esos hombros anchos se quedan quietos, como un animal siendo acechado, preparado para salir corriendo o para pelear.
Shen Yuan contiene la respiración.
"Mierda, mierda, mierda, mierda, mierd..."
—... Cualquier cosa está bien —responde finalmente Binghe, con una voz bastante queda, antes de voltearse con su eterna sonrisa tranquilizadora. — ¿Cuál es la comida favorita de Shen Qingqiu?
