CAP 3

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Yunho llegó a la empresa con una cara de pocos amigos, nadie se atrevió a decirle buenos días pues sabían que el iba cabreado.

Subió el elevador y llegó hasta su oficina en donde se postro en su cómodo sillón de cuero, mientras suspiraba profundamente y cerraba los ojos muy fuerte deseando que todo fuese un sueño.
Escucho el ruido de la puerta y grito desde el interior que pasará.

- Buen día señor, - Has hizo una venía, - le traje un té.

- Déjalo en el escritorio, - dijo sin mirarlo a los ojos.

- Si, sino se le ofrece más nada  me retiro.

- Claro

Jae estaba a punto de cerrar la puerta tras salir pero escucho a Yunho decir que esperará.

- Dígame señor - dijo con respeto.

- Toma asiento, quería saber si ¿tienes algo que hacer esta noche?

- No, nada en absoluto señor.

- Quiero pedirte un favor muy grande, y la verdad quédare eternamente agradecido si tu me ayudas.

- Usted dirá en que lo puedo ayudar.

- Como sabrás Junsu a llegado de su viaje, y sua padres lo han hecho regresar porque quieren que lo despose, pero sinceramente yo no quiero un matrimonio y menos con él.

- Si, y eso ¿que tiene que ver conmigo?

- Pues fácil y sencillo, necesito que te hagas pasar por mi novio y vayas conmigo a la cena que se organizó en casa de mis padres esta noche.

Haz esta en shock, ¿desde caundo los jefes le piden ese favor a los empleados? ¿En qué momento Yunho se había comprometido y con Junsu? Es su mejor amigo y ¿No quiero casarse con él?

- Vamos Jae, solo acepta y ya, - le suplico, - pideme lo que quieras, no se tal vez una casa, dinero, un auto, un viaje o lo que sea pero acepta, sólo será por unos días.

- Sabe que lo que e pide es algo complicado, sus padres me conocen y saben que  soy su secretario, y sobre todo ambos sabemos que la relación entre un jefe y su empleado esta prohibida aunque sea falsa, eso está mal visto antes la sociedad.

- Que importa la sociedad, además es sólo para líbrame de mi compromiso con Junsu, yo no puedo casarme con mi mejor amigo, no puedo.

Jae suspiro muy profundo - debo pensarlo - se puso de pie para salir de la oficina.

- Es que no hay tiempo para pensarlo.

Jae estaba empezando a frustrarse, el no quería mentir, a él no le gusta mentir ni le gusta que le mientan.

- Esta bien, - suspiro resignado - sólo lo hago porque yo le debo mucho y no quiero quedar mal con usted.

- Paso por ti a las 7 a tú departamento.

- No pero yo salgo a las 8 de aquí.

- Pues hoy te retiras a las 5, No quiero que te retardes

Jae salió de la oficina y se fue a si escritorio para empezar a trabajar y a agendar citas.

*******
Chunsu salió de la tienda con bolsas llenas de comida, empezó a caminar hacia su auto, no sabía a donde ir, tenía tiempo que no veía a Jae y quería volver a verlo.

El timbre empezó a soñar por todo el departamento, Jae salió de la habitación con unas pinzas en el cabello y crema facial sobre su bello rostro, mientras el timbre seguía soñando con insistencia, - ya voy, ya voy - grito fastidiado, al abrir la puerta dijo: - ¿por que no..?

Se quedó callado al ver a la persona que más había amado en toda su vida, o al menos eso creía él.

- Hola Jae, - dijo mientras levantaba las bolsas en señal de que había comprado algo para ambos.

- Chunnie, ¿pensé que estabas en Estados Unidos?

- Ow Si, regrese hace unas semanas, no te lo había dicho porque creo que tu número no es el mismo.

- Si, tienes razón, - estaba nervioso, pero pasa.

Yuchun entró al departamento y observó cada detalle de allí hasta el más insignificante. - Tú  departamento sigue igual a como lo recuerdo.

- Si, no he hecho nada por cambiar  un poco su imagen.

- Si entiendo, ¿piensas salir?

- Si, hee, tengo una pequeña cena a la  cual asistir y me estiy arreglando.

- Bueno, pues yo me retiro, no quiero que  por mi culpa te retrases.

- No pasa nada, veo que traes comida.

- Si, compre un poco de tú comida favorita.

Los ojos de Jae brillaron al escucharlo, el realmente amaba la comida italiana, por lo cual fue por un par de platos y un par de vasos.

- Toma asiento, No podemos dejar que se desperdicie esta rica comida que has comprado para mi.

Ambos empezaron a comer y a reír mientras hablaban de los viejos tiempos, hasta que Jae clavó la vista en el reloj de la pared.

- ¿No puede ser?, Yunho no tarde en pasar por  mi, - ya eran las 6:37 pm

Jae empezó a correr de un lado a otro mientras se arreglaba y buscaba sus zapatos.

Faltaba  5 minutos  para las 7:00 pm y Yunho ya se encontraba a la entrada del edificio, pregunto por el departamento de Has y subió las escaleras hasta allí, el departamento 312 estaba justo frente a él, respiro profundamente y dio golpes suaves a la puerta.

- Yuchun, ¿podrías abrir por favor? - Jae gritaba desde la habitación.

- Si claro.

Yuchun se acercó a la  puerta y abrió, la mirada de él y Yunho se cruzaron, Yunho observaba bien todo.

- Perdón, creo que  me equivoque de departamento.

- ¿Cuál busca?

- El 312

- Este es el 312, - le señaló los números sobre la puerta.

- Entonces aquí vive JaeJoong.

- Si así es, enseguida viene, pase, - Yuchun fue por Jae mientras dejaba a Yunho en la sala.

Jae no demoró en llegar. -  Buenas noches, - hizo una venía, - ya estoy listo.

Yunho sabía que Jae era guapo y atractivo, pero al verlo de esa forma tan arreglado, lo hizo pensar que el era sin duda  el doncel más hermoso que jamás aya visto en toda su vida.

Yunho le indicó que ya era hora de partir por lo que Jae le dijo a Yuchun que era mejor que se fuera a su casa y así fue como sucedió.

Ya se encontraban en casa de la familia Jung, Junsu estaba en la sala platicando con su futura suegra mientras que  el padre de Yunho estaba platicando con el padre de Junsu, Yunho entró a la casa  con la mano de Jae sobre su brazo, la familia y Junsu estaban anonados,  ¿cómo era posible que el secretario estuviera allí?

- Hijo, creo que te has equivocado esto no es una cena de negocios, esto es...

Yunho la interrumpió - lo se madre, esto es de  compromiso es por eso que Jae esta aquí.

- No entiendo, ¿a qué te refieres? - sus padre estaban confundidos.

El riesgo de querer.Where stories live. Discover now