28 { f i n a l }

3.5K 397 101
                                    

Querido Evan:

Luego de ese día, nunca más te vi. Tu fantasma me atormenta todas las noches, cada vez que cierro los ojos tu viva imagen aparece en mi mente y no puedo evitar derrumbarme en pleno llanto.

Es horrible, Evan.

Es horrible estar sentada en aquel parque, sabiendo que tú nunca llegarás, que nunca más me envolverás en tus brazos. Que nunca más me cantarás canciones que ambos amábamos.

Es horrible caminar por mi casa, recordándote sentado en el sofá, riéndote a carcajadas mientras veías tu serie favorita. O en mi cocina, tratando de hacer la cena que terminaría quemada, pero que igual comeríamos a regañadientes porque no había nada más.

Es horrible ir a mi habitación y ver como todo sigue igual, pero tú ya no estás allí, jugando a tus estúpidos videojuegos, tocando una linda melodía en tu guitarra.

No estás aquí diciéndome que soy lo único que tienes en el mundo, que soy la única razón por la cual seguías sonriendo.

No estás aquí jugando con mi cabello y confesándome tus más oscuros secretos.

Ya no estás aquí.

¿Por qué tuviste que hacerlo, cariño? Yo seguía aquí para ti, siempre lo hice. ¿Por qué tuviste que abandonarlo todo? ¿Por qué?

Cuando un policía llamó a mi puerta y me extendió una nota que decía que lamentabas todo y que ojalá te perdone, me derrumbé. Él me explicó en pocas palabras que te habías disparado y no sabía cómo diablos reaccionar. Le terminé cerrando la puerta en el rostro mientras lloraba como nunca lo había hecho antes.

Diablos Evan, el día anterior creí que podrías pasar la noche solo, me demostraste ser fuerte y me dijiste que nunca me dejarías y mierda, lo hiciste cariño. Lo hiciste. Sabía que en algún momento iba a pasar pero una falsa esperanza se colgó de mí diciéndome que te podría reparar, que podría salvarte y lograr sacarte de ese agujero negro en el cual habías caído.

Pero no lo hice, no pude salvarte.

Tuve que haberme quedado contigo y no lo hice.

Tuve que al menos haberte pedido que te quedaras conmigo en casa, pero no lo hice.

Me odio tanto por eso, Evan. Estos últimos cincos meses han sido un infierno sin ti y cariño, ya no puedo más…

Y aunque no parezca, esta es mi última carta.

Ya no puedo estar más así; aunque me aconsejaron que escribir sobre esto me serviría para dejar salir todo el dolor, sigue doliendo como el demonio y no creo que alguna vez deje de hacerlo.

Así que hasta aquí llegué, Evan.

Recordar el pasado duele y ya estoy cansada de vivir con este dolor, pero no puedo hacer nada para que la herida sane... así que tendré que aprender a vivir con este corazón roto y desolado sin ti.

Pero nunca te olvidaré, nunca.

Te quise, te quiero y te querré por siempre, cariño.

Con amor, Liz.


n/a:

Simplemente gracias por leer, lxs amo

Querido EvanWhere stories live. Discover now