✔ || ⋄ 𝓖𝓸𝓽𝓪𝓼 𝓭𝓮 𝓵𝓵𝓾𝓿𝓲𝓪 ⋄

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Gotas de lluvia.

Era lo que se escuchaba en las calles de Londres, acompañado de pasos rápidos pasos de personas sin vida, huyendo de la lluvia que iba incrementado cada vez más. Entre toda esa gente que solo se preocupaba por su propio bienestar, se encontraba un pequeño omega, asustado y preocupado cabe de recalcar, que aunque ame las tormentas, prefiere no estar en medio de una.

Viendo para todos lados, sintiendo que está apuntó de tener un ataque de pánico por todos los olores en el aire, ve su salvación en la calle contraria: la antigua biblioteca de la ciudad.

Esperando a que el tráfico reduzca logra cruzar la carretera sano y a salvo, cruzando los dedos para que el local no esté lleno de personas.

Una vez enfrente de este logra ver las letras en blanco con un fondo rojo: ABIERTO.

Sin esperar un segundo más abre la puerta de cristal tapizado de publicidad, cerrandola rápidamente para evitar que el agua moje el suelo y a él mismo. Voltea a ver el lugar, con sus ojitos brillosos y llenos de curiosidad admira lo grande que es. Libreros que tocan el techo, todo ordenado, con un toque de elegancia y al mismo tiempo antiguo.

Da unos pasos a adelante, hipnotizado con la tranquilidad que transmite el sitio, dándose cuenta de la señora de avanzada edad que se encuentra detrás de un largo escritorio. Supone que es donde se realiza el trámite para la compra o renta de libros.

La señora, beta, le saluda.

- Hola cariño, no tengas pena en pasar. Eres libre de estar el tiempo que quieras, ya sea para escapar de este horrible diluvio o simplemente sentarte a leer un libro o comprar algo... -

No pudo seguir escuchando mas las palabras de la beta, pues un delicioso olor a café, roble fresco y pan recién horneado llegaron a su nariz, haciéndola picar. Gira a su derecha, dejándose llevar por su instinto omega camina en busca la fuente de ese aroma que logró cautivarlo.

Cuando va a doblar por un pasillo se encuentra a un joven alto, tez acaramelada, nariz respingona y lo mas llamativo, sus ojos azules, como el océano pero mas profundos. Su omega quiere lanzarse a sus brazos y enterrar su nariz en la fuente de olor del alfa.

Sin saber que los instintos del joven alfa quieren hacer lo mismo, ese dulce aroma a chocolate, pasto mojado y canela hizo que detuviera sus apuntes de su próximo examen de medicina para ir en busca del dueño del olor.

Tal como dicen en los cuentos antiguos cuando se encuentra a tu... pareja destinada. Detienes toda acción que estuvieras realizando para que tu animal interior tome control de ti y te dirija a la fuente del aroma.

Cuando sus ojos chocan entre si, sienten como todo a su alrededor desapareciera, azul y verde mezclándose. Ambos obteniendo un poco del color del otro en sus orbes, empezando una unión especial y única.

Acercándose poco a poco, sintiendo sus respiraciones mezclarse, sus labios rozarse. El mayor coloca sus manos deforma tierna en la cadera del más chico mientras este se pone de puntitas sosteniéndose con sus pequeñas manitas en los anchos hombros del alfa. Tan cerca de unirse en un suave beso.. pero toda la magia se pierde cuando un fuerte trueno resuena por la ciudad, cortando la electricidad, dejando la biblioteca en plena oscuridad.

El omega inconsciente salta al alfa, enredando sus piernas en la cintura de este y abrazando su cuello, quedando cara a cara mientras el más alto pasa sus manos por la espalda baja del chico para sostenerlo mejor.

- Yo.. yo le te-tengo miedo a la oscuridad, lo siento yo.. - empieza a tartamudear el omega tratando de bajarse pero el alfa encantado con su suave voz, lo hacer dar un saltito para acomodarlo mejor en sus brazos.