El Alfa que odio, ¿es mi Alfa?

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-Disque lo odiaba.

-Más bien creo que siempre le ha gustado.

-Igual y todos sabíamos que terminaron juntos.

-Ni siquiera se merece que MinHo lo mire, es tan idiota.

-MinHo debería salir con alguien de su edad, no con um chiquillo que acaba de cumplir 18 años.

-Yo creo que hacen linda pareja. - había interrumpido su escucha de aquella mesa no tan alejaba de ellos para que su cacheton amigo dejará de liberar feromonas tristes. Felix lo miraba atentamente mientras le sonreía, pero JiSung sentía que eso no era suficiente.

Porque siempre estaba peleando con MinHo, en todo momento, quejándose de él por siempre marcarlo con su aroma y ahora resulta que ambos se quieren y que son Alfa y Omega. Eso nadie se lo creía, mucho menos las Omegas que lo odiaban y los Alfas que lo deseaban. Y quizás estaba siendo muy obvio con su sentimiento porque más de un Alfa lo miraba con intensión de querer acercarse para abrazarlo, pero deteniéndose al conocer a Lee MinHo.

Felix no sabía que más hacer para ayudar a su amigo.

-Sungie. - volvió hablar Felix cuando vio cómo los ojitos azules de su amigo Omega se llenaban de lágrimas poco a poco. - no llores, Sungie, si MinHo se entera que...

-¡¿Qué le estan haciendo a JiSung ahora?! - se escucho el grito desde la entrada de la cafetería de la escuela.

-Lloraste va a matarlos a todos... - dijo, pero obviamente era muy tarde para eso porque Lee MinHo estaba más que enojado escuchando los murmullos dirigidos hacia el lindo Omega que lo adiaba.

Sin detenerse a tratar de entender el punto de los demás, llegó a dónde JiSung y se sento a su lado acariciando sus hermoso cabellos castaños mientras lo abrazaba. JiSung solo podía sentirse peor que antes. Todos los miraban, murmuraban y hasta los señalaban como si acabarán de cometer algún delito o infidelidad, como si JiSung hubiese engañado a su Alfa y MinHo a su Omega. Realmente se sentía así ahora.

Así que lo empujó y salió corriendo de la cafetería. No se quedaría ni un solo instante más ahí, no podía. Se culpaba por siempre pelear con el Alfa, de que ahora nadie los quisiera ver juntos. Porque su vida escolar estaba llena de discusiones en que JiSung le exigía no abrazarlo o cuando se peleaban a gritos en los pasillos porque MinHo corría a sus compañeros de su lado aún así fueran Betas.

Entendía a sus compañeros. O al menos lo intentaba.

Llamó a su hermano mayor para saber si se encuentraba libre y podría ir por él, Chan ni siquiera necesito preguntar la razón, llego por llego en menos de dos minutos. JiSung solo se lanzó a sus brazos llorando, aferrándose a su hermano como si este fuera su Alfa, como si él buscará convencer a su Omega que este Alfa también podía cuidarlo y que olvidarse de MinHo era lo mejor.

Que más daba ahora. Nadie los quería juntos.

-Ya tranquilo, estarás bien, siempre estás bien. - dijo su hermano sin intensiones por soltarlo. El lindo Omega que tenía por hermano podía verse muy lindo y débil, pero él lo conocía mejor que nadie y sabía que antes de lo que todos esperaban, él estaría sonriendo como siempre.

Solo esperaba no equivocarse en ello.