¿ Y si Los Vengadores ... ? -TERMINADA-

ESPECIAL CHARLES XAVIER X ERIK LEHNSERR (Cherik)

Magneto y el Profesor Xavier primero fueron muy buenos amigos, después se convirtieron en formidables enemigos, pero que hubiera pasado si ese sentimiento de odio tan similar al amor o enamoramiento evolucionará y estos dos mutantes se dieran una oportunidad de amar y vivir una buena vida.

Charles Xavier, de algún modo habían hecho cambiar al gran Magneto y después de mucho por fin decidió dejar su odio atrás para contrarrestarlo con amor, además era feliz, Charles lo entendía y cuando en ocasiones se dejaba llevara por el odio y los malos recuerdos o momentos, El profesor X estaba para él, no lo hacía a un lado o lo regañaba, se quedaba con él y lo ayudaba a calmarse.

Había encontrado su calma en la tormenta, la alegría en la melancolía y el amor y cariño en la soledad; ambos eran felices al lado del otro y en diciembre Charles quiso compartir con su ahora prometido las fiestas navideñas, pero ese sería todo un reto para el telepata.

Para el telepata hasta ese momento nada había sido difícil, ni siquiera el hecho de que su cabello volviera a crecer y seguir presumiéndolo o incluso nada le impidió seguir viviendo a pesar de estar en una silla de ruedas.

Pero porque era tan difícil para él, armar una bonita velada navideña para el y su prometido, la Navidad la pasaron juntos y con todos los jóvenes mutantes, en una cena llena de felicidad.

Pero ahora que se acercaba fin de año, el quería hacer algo más especial en donde está vez solo fueran el y su prometido, pero nada estaba saliendo como el quería.

No podía recordar que celebraciones tenía su pareja al ser judío, tenía miedo de arruinar todo lo que había logrado hasta ahora y ese día al ser el treinta y uno de diciembre en la mansión Xavier tenía que preocuparse de muchas cosas ese día.

Desde temprano estaba levantado, pensando que iba a hacerlo todo de una vez, pero sucedió todo lo contrario.

En su armario encontró dos suéteres con temática navideña y pensó en ponérselo pero el tiempo no le estaba alcanzando.

Decidió dejar de preocuparse un poco por el tiempo y hacer sus responsabilidades de la mejor manera posible.

Comenzó el día dictando sus clases, no sin antes dar un beso y una sonrisa de buenos días a su pareja, Erik Lehnsherr, que recibió y devolvió con cariño el saludo.

El telepata, se encargó de impartir sus clases esa mañana de la mejor manera posible, menos mal al ser un día de fiesta las clases duraban poco.

Mientras Charles daba clases, el gran magneto se encargaba de supervisar todo lo referente a las clases y que ningún estudiante hiciera un caos o un desastre, mientras el director no estaba para impedirlo.

Erik estaba pasando su día, cuidando niños y con su ya conocida cara de seriedad esa que en algunos estudiantes causaba terror.

Llegadas las doce del mediodía, Charles corrió lo más rápido que su silla de ruedas le permitió y fue a esa enorme habitación que compartía con Magneto.

Intentó preparar una cena para ambos, mientras comían escuchando las doce campanadas que iniciaban el año nuevo, además de que sacó los dos suéteres que tenía en su armario o al menos eso pretendió, porque le llegó una llamada de una emergencia urgente en la cuidad y tuvo que ir a organizar la misión y Magneto se ofreció ir para supervisar a los más jóvenes y su pareja no pudo negarle nada.

Una vez más a Charles Xavier no le salían las cosas como el quería que se dieran; para terminarla de empeorar le llegaron montañas de papeleo que no pudo pasar por alto.

Cuando magneto regreso a la mansión Xavier, no encontró en ningún lado a su pareja, en cambio se encontró con todos los estudiantes felices esperando las doce de la noche para cantar feliz año nuevo y escuchar las doce campanadas que anunciaban el año nuevo.