I Hear a Symphony (Erasermic) EDITANDO

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POV Narrador

Era de noche y había empezado a llover. Aizawa llegaba caminando y Hizashi ya estaba saliendo de la tienda. El peli-negro estaba por cruzar la intersección de las calles cuando lo vio.

Tengo que hablarle

Fue lo que pensó y dio unos pasos, así quedando en media intersección, no habían carros, así que no era un problema.

¡Hizashi! - lo llamó antes de que se pudiera ir. El rubio se giró, obviamente, reconociendo la voz. Tenía el rostro apagado. - ¿Podemos hablar? - preguntó manteniendo su distancia.

No sé si hay algo de que hablar. - respondió.

Claro que lo hay. - rió por nerviosismo. - Quiero saber si hice algo mal. - el silencio que pudieron tener en un espacio cerrado era interrumpido por la lluvia que mojaba a ambos chicos.

¿Hacer algo mal? ¿A qué te refieres? Sinceramente no entiendo a que viene todo esto. - lo miró confundido.

Como no vas a entender Hizashi, ¿Porqué terminaste conmigo? ¿Es que acaso hice algo mal? O simplemente te aburriste de mí. - hablaba con voz temblorosa.

¿Terminar contigo? Yo nunca terminé contigo, fue al revés. - ahora ambos estaban confundidos.

¿Cómo que al revés Hizashi? ¿De qué hablas? - preguntó.

Del mensaje. - le respondió acercándose un poco más.

¿Qué mensaje? - volvió a preguntar haciendo gestos con sus manos.

Bueno pues a las once de la mañana del lunes me dijiste: "Yamada esta va a ser la última vez que te escriba y también la última vez que sabrás algo de mi. Quiero terminar esto. Mi padre tenía razón esta era una fase, ya se me va a pasar. Con todo eso aclarado me despido. No me vayas a buscar.", y sí me lo aprendí de memoria porque lo leí tantas veces al no creer lo que estaba viendo. - habló dolido.

Once de la mañana... un lunes.. - mumuró pensando. - No pude mandar ese mensaje porque a esa hora estaba dormido. - pensó un poco más. - ¿Tú me llamaste por esas horas no? - volvió a verlo.

Claro que no, porque lo haría si supuestamente me dijiste que no querías que te buscara. - respondió.

Porque mi papá me dijo que él contestó una llamada tuya diciendo que no me amas como decías que lo hacías. - le dolió recordar esas palabras.

What?! Yo nunca diría algo como eso. Ni siquiera de broma. - Aizawa llevó sus manos a su cabello, tirándolo hacia atrás.

Todo fue su culpa... - rió de nuevo. - Todo fue su culpa y yo me lo creí. - por más de que no se pudiera ver bien, tenía lágrimas en sus ojos. - Me hizo pasar por un dolor terrible cuando me dijo esa mentira. C-Cuando dijo que no me amabas yo... y-yo no... - empezó a llorar y sus manos temblaban.

Yo si te amo. Te amo demasiado, más de lo que te puedes imaginar. - ahora Hizashi era el que tenía lágrimas en los ojos, pero las ignoraba. - Te lo prometí ese día en la playa y lo pienso cumplir hasta que me muera, aunque tú dejes de amarme yo voy a seguir haciéndolo. - el azabache lo miró y sintió como si hubiera salido de un lago profundo en el que se estaba ahogando. Pudo respirar con tranquilidad de nuevo al escuchar sus palabras.

Yo tampoco te dejaría de amar. - fue lo último que dijo antes de correr y lanzarse a sus brazos. Hizashi lo sostuvo con fuerza, levantándolo.

Se besaron en medio de la lluvia. Esto era lo que más querían, lo que estaban esperando. Nada les importaba, solo querían quedarse al lado del otro.

Llévame contigo. - habló el azabache. - No me importan mis padres, les puedo avisar después. - lo miró a los ojos. - Quiero que esta noche sea de nosotros. - en respuesta el rubio sonrió asintiendo y lo tomó de la mano para irse corriendo a su casa.