El Hombre Sin Miedo (Saga: El Cazador Libro#2)."Actualizaciones Lentas""

Capítulo 28 "El Oso y El Ave"

25 de Agosto del 2021.
Este de Japón. Cueva del Oso.

-Esta historia hablará de mi enfrentamiento con Himel y con su compañero, WingJager, cerrando así este ciclo de historias-Victor le dio un sorbo a su café-Te voy a contar varias cosas que he descubierto de mi amigo Himel y que me tienen pensativo.

-¿Tan malo es?-Indagó Juliette.

-Depende, pero bueno, antes de mi historia, dejemos que Himel nos cuente cual es su misión-Propuso Víctor señalando al enorme Oso.

Himel soltó un bufido, agitando los labios del animal. Pareció meditar por unos momentos antes de hablar, con aquella voz profunda y llena de eco, en las mentes de los jóvenes.

-Nuestra existencia ha estado desde millones de años atrás, hemos tenido diferentes cuerpos animales y hemos vivido miles de momentos importantes....

Notaron como poco a poco se iban adormeciendo, su cuerpo comenzaba a pesar, sus párpados caían solos, comenzaban a dormirse, un sueño inducido por el oso que los llevaría a tiempos lejanos, a tiempos donde el universo era una batalla aún más grande entre el caos y la paz.
Así, ambos jóvenes fueron llevados, por la voz del guardián, hasta tiempos remotos. El conocimiento que quedaría con ellos, lo llevarían hasta sus muertes.

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Podría decirse, que millones de años antes, cuando los universos comenzaron a formarse, los dioses, seres omnipresentes, todopoderosos nacidos de algo incluso más poderoso e incomprensible, tuvieron que asignarse cargos. Los universos estaba avanzando y ellos tenían la tarea de controlarlos, de velar por ellos. Fue así como de fueron creando los distintos mundos y planetas. Los dioses con sus grandes poderes traían vida a los universos. Mundos que comenzaban a avanzar.

No tardaron en alzarse los dos primeros dioses, siempre presentes en todos los rincones de todos los universos. El Destino y La Casualidad. La Vida y la Muerte fueron los siguientes, creando así el ciclo que define a todo ser vivo. Los primeros animales comenzaron a nacer. Se creó el día y la noche. El Dios del Tiempo nació y creó, como su nombre lo indica, el tiempo. Al ver que los distintos universos amenazan con estrellarse, siendo está la primera amenaza para los dioses, creó por igual muros invisibles, que dividían los múltiples universos.

Varios dioses adoptaron roles, creando sus propias formas de vida. Pero así fue como comenzaron los primeros conflictos.

Imagine, cuantos dioses hay por universos, paralelos y cada uno diferente. Con su encanto único, cada uno con su propia historia, su propia evolución.

No todos los dioses eran benévolos, siempre hay mal, siempre lo habrá. El Dios del Miedo y El Hambre. GarGoroth, el Devastador, UndeKrester, el dios de las plagas. VileKoss, el señor de los no muertos. Figg, el Dios Serpiente. Incluso Jesús Hombre y Satanás figuran entre ellos.

Pero ninguno fué una amenaza tan grande como lo fue Apollyon, El Dios del Caos.

Apollyon, una nada amorfa, indescriptible, de pesadilla, muerte, de destrucción estúpida y sinsentido. Acabando con toda forma de vida y con todo universo que se encontraba, seguido de un ejército de titanes, creaciones suyas. Apollyon, fue, en aquellos tiempos, la mayor crisis que los dioses enfrentaron. Se necesitó que muchos unieran fuerzas para detener al malvado Apollyon y sus Titanes.

Por los distintos universos, un grupo de dioses. El Destino, La Casualidad, La Vida y La Muerte, Sveltmer, La Diosa de la Bondad, Darkest, El Dios de la Oscuridad, incluso el mismísimo Dios del Tiempo y muchos otros dioses cazaron a Apollyon por los distintos universos. En la última batalla, el centro del mismo universo, donde solo reinaba Oscuridad, El Señor del Tiempo con un poderoso conjuro, dividió a Apollyon en diferentes partes, destruyendo su ser perfecto, fragmentandolo.