Capitulo 1 - Querido Diario

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"La que escribe hoy este diario, es un compendio de varios pedazos de lo que fue una mujer. Hoy entiendo que mi vida no es más que un ciclo donde la tragedia se me repite de una manera cada vez más cruel. Es como si no hubiera aprendido de mis dolores, de mis muertes pasadas. Ya no tengo alientos para resucitar; no vale la pena. Y no solo porque el hombre de mis sueños se me convirtió nuevamente en mi verdugo y me condenó otra vez a la soledad y el dolor. Y no es solamente por mi historia con Miguel y su apuesta y la de Don Armando y sus engaños por mantener una empresa. Es la historia que se me repite desde que nací.

Todos los recuerdos que vienen a mi mente cuando me rechazaban, se burlaban de mi en el colegio, todo lo que no podía hacer porque mi papa me lo prohibía, todas esas mentiras y engaños en las que me toco vivir y que ahora, se vuelven cada vez más dolorosas. Nunca he pensado tomar venganza por todo lo que me han hecho, aunque se merezcan el infierno propio, siempre he perdonado, aun así me cueste, pero ya no creo mas en esa mentira, puede que perdone mil y una veces, pero cada vez sufriré mas y mi tragedia se volverá peor, ya no lo puedo soportar, después de tantos insultos, menosprecios, injusticias, burlas que me han hecho por fea, ahora es el tiempo para vengarme."

Termino de escribir Betty en su diario, esto la relajaba, ahí podía expresar lo que sentía y de una manera u otra, la hacía sentir más tranquila. 

Ya era bastante tarde, y Betty de solo pensar que tendría que ver a Don Armando al día siguiente, la hacía sentirse más decepcionada, traicionada y adolorida, que no quería ni dormir, se puso su pijama, se recostó en su cama y trato de quedarse dormida pero no pudo. En lo único que pasaba por su mente, eran flashbacks de su triste niñez, como se burlaban de ella y la molestaban sin poder conocer a la persona tan bonita que estaba dentro, Betty se puso a llorar, y de tanto llorar, se quedó dormida.

*Al día siguiente*

Era un amanecer bastante frio y nublado en la capital, había llovido durante toda la noche y a través de las ventanas, se lograba ver los grandes charcos que quedaban en las orillas de las calles y como todo estaba empapado por la fuerte lluvia que había ocurrido. A eso de las 6 de la mañana, Doña Julia, ya estaba en la puerta del cuarto de Betty para despertar a su hija para que no llegara tarde al trabajo.

Doña Julia: ¡Betty! Mija, como amaneció? ¿Se siente mejor?

Betty: Si, ma ya me siento mejor, todo bien -mintió

Doña Julia: Okay, mijita, ¿segura? Recuerde que usted me puede contar todo lo que quiera a mí, pero mejor vaya levantándose que se le va a hacer tarde, que su jefe fijo la debe de estar esperando

Con tan solo escuchar la palabra 'jefe' se le había quitado el sueño, no quería escuchar nada que tuviera que ver con Don Armando

Betty: Si, tranquila ya me levanto, ¿pero por qué?

Doña Julia: Ayer llamó, preguntando por usted, que necesitaba algo, no me dijo que era, pero que era importantísimo, y como usted en ese momento estaba con Nico en el cuarto y como había llegado como un poco baja de nota, pues le dije que estaba ocupada, que podía llamar más tarde

Betty: Ahh, bueno yo igual mas tarde hablo con Don Armando para ver para que me necesitaba

Doña Julia: Bueno, Betty, ya abajo esta el desayuno para cuando esté lista, mijita.

Doña Julia al decir eso, cerro la puerta del cuarto de Betty y se dirigió al piso de abajo.

Betty comenzó a pensar que se pondría hoy y en especial como tomaría venganza de Don Armando y el Doctor Calderón, pero opto por no ir a trabajar esos días y tomarse tres días de descanso, no se sentía que podía ir a trabajar como estaba, quería que su plan saliera a la perfección, y primero, debía planearlo. Betty, aunque no quería, llamo a Don Armando y sorpresivamente contesto, y lo único que iba a decirle, era que faltaría esos días, Armando no estaba del todo convencido, pero le tocaba. La empresa estaba en manos de Beatriz y no podía hacerla enojar, así que finalmente, cedió. 

Después, Betty llamó a Doña Catalina, necesitaba su ayuda, su apoyo, también le pidió que la aconsejara con algo que iba a hacer, Betty ya tenia una idea de lo que tenía pensado para su venganza, pensó que antes de regresar a Ecomoda debería convertirse en una mujer más atractiva, y esto no solo lo haría por venganza, sino que también lo haría por ella misma, ya estaba cansada de tantas burlas y como jugaban con ella y la menospreciaban, solo por su físico.

Betty se arregló, y bajo las escaleras dirigiéndose al primer piso, se comió el desayuno que su madre le había preparado y esperó a doña Catalina, ya que habían cuadrado una hora para que Catalina la aconsejara y la ayudara en su 'transformación'. Doña Catalina llego, saludo a Betty y le indico que se montara en su carro.

Doña Catalina: Betty, ¿Cómo amaneció?

Betty: Si le soy sincera, mal, no pude dormir en toda la noche, llore como nunca lo he hecho y no tengo fuerzas ni ánimos para ir a la oficina, por eso quería que me aconsejaras y me ayudaras en lo del cambio, para sentirme mejor conmigo misma.

Doña Catalina: No se preocupe, del cambio me encargo yo, pero le recomiendo que piense bien lo que hará porque los días que le esperan en Ecomoda, no van a ser para nada fáciles, piensa dos veces cualquier cosa. No te apresures a cometer algo que después te vas a arrepentir, piénsalo con calma y no hagas las cosas por rencor ¿Sí?

Betty: Si, eso hare Doña Catalina

Ahí arrancaron y fueron a la empresa de Doña Catalina, fueron a su oficina y se quedaron hablando por varias horas. Betty estaba desahogando todos los sentimientos reprimidos que tenía adentro, lloraba y le contaba exactamente como se sentía. Cata la escuchaba atentamente, le aconsejaba lo que debería de hacer y pensar, duraron ahí un tiempo más y Betty ya se había tranquilizado y se veía un poco mejor, ahí fue donde Cata le dijo que planearan como seria el cambio de look, decidieron que primero irían a una peluquería y después ya por la ropa, accesorios, etc. 

Como ya era de noche, Catalina dejo a Betty en su casa, se despidió de ella y le dijo a qué hora la recogería mañana, Betty entro a su casa y ahí estaban sus padres esperándola para la cena. Estuvieron hablando un rato y después ella subió a su cuarto, estaba muy cansada no quería hacer nada más que escribir en su diario y dormir, abrió su cuaderno de flores y comenzó a escribir.

"Hoy he podido desahogarme con Doña Catalina, y se sintió tan bien poderle contar a alguien todos tus pensamientos, sentimientos y que esa persona te pueda aconsejar y ayudar, me hace sentir mejor. También me ayudara con mi 'Cambio de look', pero tengo miedo, no sé qué pueda pasar, la primera vez que lo hice no salió bien y termino siendo peor, todas las burlas de Patricia, Doña Marcela y el Doctor Valencia, me duelen, todas esas palabras hieren y me afectan, aunque he lidiado con ellas desde que nací. Quiero convertirme en una mujer diferente, ya no quiero seguir siendo 'Betty, la fea', estoy muy cansada de todo y se sentiría tan bien que por lo menos me respetaran. 

Ya mañana es el gran día y espero que todo salga bien, no quiero volver a Ecomoda para nada, con tan solo ver a Armando y al Doctor Calderón me dan ganas de vomitar, como planearon un plan tan fríamente calculado y enamorarme solo para que no me quedara con la empresa, es que aun no entiendo como caí en sus sucias trampas, sus engaños y todos sus regalos. Lo que mas anhelo es que esta pesadilla en la que estoy viviendo termine pronto."

Beatriz estaba exhausta y apenas se puso su pijama y se recostó en su cama, quedo profunda. 

Mis Cartas de VenganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora