entre organizaciónes, no hay amor

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"pobre alma abandonada". Eso fue lo que escuche antes de desvanecerme por completo en la oscuridad, no sentía nada mi corazón se estaba apagando, se me hizo más pesado respirar...y aun recuerdo esa mirada, esa mirada no tenía intención de salvarme desde un principio, por un momento, confíe en que esa persona cambiaría de ser como es, y tendría por lo menos un poco de compasión, pero me equivoque, esa cosa nunca podrá cambiar fui un imbécil al querer confiar en el, y por mi estupidez, estoy muriendo...nunca debi
....haberte amado

...

El pelirrojo se encontraba en una habitación grande, adornada con un tapiz color rojo una suave cama con hermosas cobijas gruesas que lo cubrían del frío por la intensa lluvia que había afuera, muchas preguntas inundaban su cabeza ¿acaso estoy muerto? ¿Dónde diablos estoy?
¿Que clase de infierno es este? Tenia muchas preguntas, hasta que levanto medio cuerpo y vio sus manos

Chuuya: je...carajo, se siente tan real, no imagine que así se sentía estar muerto

Emily: no lo estas—paso de ver su libro a ver a chuuya, ella estaba aún lado de la cama, postrada en un sillón

Chuuya:—se sobresalto por la repentina voz de la mujer con la que había peleado dazai—tsk...si claro, estoy seguro que tu también estas muerta

Emily: no lo estoy y tu tampoco lo estas Nakahara-san—cerró su libro, se levantó y le dio una mirada con tristeza

Chuuya: tsk, por favor, deja de mentir

Emily:—se acercó a él y le jalo el cachete

Chuuya: auch! Esta bien, ya SUELTAME

Emily:—lo soltó y le trajo una bandeja con comida—que bueno que lo entendió

Chuuya: como diablos estoy vivo

Emily: yo lo salvé, su pobre alma no merece ese trato, ya veo por qué todos lo odian

Chuuya;—bajo la cabeza y recordó todo lo que había pasado—fui un idiota al confiar en el, creí que...por lo menos...habia cambiado un poco

Emily: vi todo lo sucedido, pero verá, ese tal dazai en realidad no perdió, yo fui la que perdí, seguí tentandolo a salvarlo, pero me e equivocado, y los rumores que se decía de él, veo que eran verdad

Chuuya: es un maldito manipulador que lo único que hace es usar a las personas para su conveniencia

Emily: lo lamento...lamento todo lo que le pasó

Chuuya: yo no necesito su lástima, debo volver a la port mafia

Emily: no puede, su cuerpo está muy frágil y si sale, lo mataran de inmediato

Chuuya: ¿A que te refieres?

Emily: mi jefa no sabe nada de esto, esta mansión es mía, y mía fue la decisión de salvarlo a usted, no salga a menos de que quiera morir

Chuuya: entonces...porque sigues aquí, si de verdad eres buena

Emily: Nakahara-san, yo aun no tengo nada que decir, pero le aseguro, que no estoy en su contra, ni tampoco de las demás organizaciones, solo le pido, que confíe en mi

Chuuya: porque debería creerte

Emily: es decisión de usted si me cree o no, basta de preguntas y coma
—dejo la bandeja que había tomado en las piernas del pelirrojo