Capítulo 1: "Graysonn"

1.4K 122 5
                                    




Oí cómo Alo me llamaba, corrí dentro de la casa para buscarlo, y lo encontré hablando con una chica que aparentaba su edad. Al verme me sonrió y se levantó para presentarnos.

— Em ste Lena.—Alo habló e intenté entenderlo, tarde unos segundos en procesar lo que había dicho y me presenté.

—Ai laik Melisa.

—Tienes que mejorar ese acento, chica del cielo.

Habían pasado un mes y medio o algo así desde lo sucedido y extrañaba con todo mi ser a los chicos. El terrestre que me había salvado, Graysonn, me había llevado hasta su pueblo y me había acogido con su familia.

Alo, el más chico, hacía el intento de enseñarme su lengua, mientras que Graysonn y su padre Noha me entrenaban, la madre de Alo y Graysonn había muerto en combate hacia muchos años me habían comentado.

La chica habló unos minutos más con Alo, y yo interpretaba algunas palabras, guerra, pueblos, montañeses.

Algo que Gray me había comentado era que así como había de su gente, habían más pueblos y en la montaña, dentro de un búnker se hallaban los 'hombres montañeses' y que ellos habían captado a mis compañeros. Desde ese momento, todas las noches, a escondidas, buscábamos a mi gente.

Me alejé para dejarlos hablar tranquilos y me dirigí a mi lugar de trabajo. Entre las plantas y la tierra.

—Melisa.—Gire mi cabeza, encontrándome con Graysonn mirándome divertido.—Suelta eso y vamos a entrenar.

Termine de quitar un par de raíces del suelo y lo seguí torpemente. Nos dirigimos al lugar de siempre, entre medio de un círculo de árboles, se puso enfrente mío en posición, esperando un ataque de mi parte.

Me sacudí la ropa y lo miré un par de segundos, corrí directo hacia el e intenté pegarle fallando en el intento y cayendo directo al suelo, escuché una risa de su parte y me ayudo a levantarme.

—No es gracioso.—Lo miré con una ceja alzada mientras me volvía a sacudir la ropa.

—Pues a mí me parece bastante gracioso, si te soy sincero.—Rodé los ojos y volvió a reír levemente.—Vamos. Inténtalo otra vez.

Esta vez corrí hacia el, pero antes de el poder hacer algo, pateé sus piernas haciendo que cayera sentado al suelo. Abrió los ojos sorprendidos y me miró intrigado.

—Tu padre me lo enseñó.—Asintió y resopló, le tendí la mano para ayudarlo a pararse.—Vamos, arriba.

Tomó mi mano pero en vez de subir, tiró de mí hacia abajo y caí encima suyo. Comencé a reír mientras lo evitaba con la mirada pero inmediatamente sentí su mano tomar mi barbilla, obligándome a mirarlo directamente.

Nos quedamos así por unos segundos, cuando un ruido detrás nuestro nos hizo separarnos rápidamente. Alo se encontraba comiendo una fruta y mirándonos con una rara expresión.

La incomodidad me invadió así tanto como la imagen de Murphy. Ni Graysonn ni yo hablamos y Alo precio notarlo cuando tiro la manzana a un lado y se acercó.

—Quiero practicar.—Graysonn asintió y yo me retire rápidamente de allí, volví a la casa y me encerré en ella, sin percatarme que Noha se encontraban allí.

Alzó una ceja y me miró esperando algo que explicase mi actitud.

—Casi beso a Graysonn.—Soltó un 'Oh' y sonrió diminutamente.—No. No está bien, tengo novio.

Noha decidió no iniciar una conversación y se lo agradecí internamente.

***

Me distraje haciendo de comer, la noche caía encima nuestro y los chicos aún no volvían, yo estaba preocupada pero Noha me decía que era algo normal que se tardaran tanto.

Salí de la caseta tomando camino al lugar de entrenamiento, Alo se encontraba tirado en el suelo comiendo alguna cosa y Graysonn tallaba una rama, supuse que hacía una lanza.

—Chicos la comida está hecha.—Alo al escucharme se levantó rápidamente y corrió a la casa, Graysonn en cambio me miró y siguió con lo suyo.—Graysonn.

—No tengo hambre ahora. Puedes irte.

Me acerqué a él y me senté a su lado, admirando cada facción de su cara. Una mandíbula totalmente marcada y una mirada hazel, era verdaderamente lindo.

—Todavía no entiendo..—Habló nuevamente y supe fácil a lo que se refería.

—Es mi novio Graysonn, no puedo hacerle eso.—Me miró de reojo, fulminandome al instante.— Y tu no puedes llegar y simplemente borrar eso.

—Se que te gusto.

—Eso no tiene nada que ver.— Me levanté y le tendí la mano para ayudarlo a levantarse, la tomó con una expresión dura y se quedó enfrente mío.—Hay que ir a comer con...—Se acercó aún más, dejando solo unos centímetros entre nosotros, alzó una ceja.—Tu padre debe estar esperando.

Me alejé de él triunfante y escuché como bufaba detrás mío.

Melisa || John Murphy || PAUSADA Where stories live. Discover now