over heat 지국 jikook

sesenta y cinco

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El rumbo de aquel navío continuo por al menos los días que había predicho Yoon Gi, y a sugerencia de Tae Hyung que decidieron continuar. Durante todo el trayecto continuaron observado aquellos reflejos de los que Medusa se hizo cargo de hacer aparecer. Con mucho cuidado y cautela iban esquivando uno por uno, e incluso en dos ocasiones casi entran a uno sin querer porque estos aparecieron de la nada. No podías descansar siquiera de pensar en que podrías acabar en otro lado, y nunca llegar a tu destino.

No servía de nada que Ho Seok intentara trazar un rumbo, la brújula que tenía en la mano no funcionada y la función de Yoon Gi como brújula humana, menos. Los psychí de aquellos cuatro tripulantes yacían totalmente dormidos y ni siquiera les respondían, pero seguían ahí.

Palabras habían sido intercambiadas entre cada uno de ellos, solo las necesarias y sin ir más allá, sentían que si intentaban buscar una distracción algo les tragaría y les haría perder la realidad en la que se encontraban.

Ji Min en ningún momento se separó de Jung Guk, y este a su vez solo continuaba viendo el océano con anhelación. No podía saltar ahora que estaba libre de que le encontraran, pues también los reflejos yacían bajo el agua.

—¿Cuánto nos falta Min? —pregunto Park quien se acercó hacia donde se encontraba.

—Horas, e incluso minutos.

—¿A qué te refieres?

—El tiempo aquí está loco, si no fuera por el sol, las estrellas o el pedazo de luna que está ahí arriba nos hubiéramos perdido hace mucho. Se que sigo en la dirección correcta, pero a veces el sol se detiene, y luego de un tiempo comienza a moverse rápidamente... mira.

Park miro al horizonte, era cierto. El sol estaba bajando demasiado rápido hacia el ocaso, y en ese momento en que pasaron solo algunas décimas de segundos, este se detuvo totalmente.

—Diles a todos que se preparen, podríamos estar llegando a nuestro destino.

—¿Eso en qué momento será?

—Justamente cuando el sol se termine de esconder... en ese momento habrán pasado los dos días exactamente. —explico.

El tripulante no dijo nada, solo hizo justamente lo que el navegante había pedido. Tae Hyung se encontraba en lo más alto, por lo que escucho la conversación de aquellos dos. En cuanto vio que Ji Min entro al camarote del capitán, quien estaba con Ho Seok, no dudo en bajar de un salto y caer justo al lado de Jeon.

—¿Qué opinas? ¿Cómo sabremos cual reflejo es el correcto?

Desde que Jung Guk le había salvado no habían hablado de esa manera tan cercana, pero los silencios ya no eran nada incomodos y Jeon se sentía protegido, ya no como un enemigo. Era su manera de decir que estaban bien entre ambos.

—Hay un patrón, —comenzó a explicar, —cuando el sol está en lo alto los reflejos de arriba son los que parecen tener vida y luz propia, en cambio cuando llega la noche este brillo se traspasa a los que se encuentran debajo del mar.

—¿No hay nada más?

—No, aparte del tamaño, unos son más grandes que otros, pero al parecer cuando pasamos al lado de cada uno... nuestro reflejo no se puede observar. Es como si cada uno de ellos solo fuera un espejo sin reflejo, a pesar de que Medusa los llamo de esa forma, —expreso su forma de pensar. —Seok Jin hyung también los está vigilando.

—Y justamente de eso quería venir a hablarte, —comento el mencionado quien se unió a la conversación justo a tiempo. —¿Recuerdan lo que Medusa dijo?