ETERNAMENTE

430 48 26
                                    

GÉNERO: ROMANCE. PÉRDIDA FAMILIAR. SONGFIC

ADVERTENCIAS: POSIBLE SENSIBILIDAD ANTE EL TEMA DE LA MUERTE.

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Recuerdo bien esa noche. Cuando desde ese día sentía cada vez más mi pecho oprimirse al verte sufrir postrado en la cama. En nuestra cama. Como si presintiera que la esperanza en cuestión de un parpadeo pudieras desaparecer junto con él.

- ¿Y si algo te pasa mientras no estoy? – te dije en tono preocupado tomando tu mano cuando mencionaste que no debía estar todo el tiempo a tu lado.

- Recuerda – me devolviste o en tu esfuerzo de sostenerme la mano, mientras me sonreíste algo débil – que todo en la vida cambia – callaste unos segundos – por esa razón, necesito que me prometas que... - sacudí la cabeza en negación interrumpiéndote.

- No importa lo que pase, te prometo no faltarte.

- Lo sé. Pero tal vez yo a ti sí.

Y lo peor de todo, es que muy en el fondo intuía que tus palabras fueran a volverse realidad. Mas nunca me imaginé lo pronto que podría suceder.

- Sebas... - me llamaste con aquel tono apagado que jamás podré olvidar.

- N-no... no hables – te supliqué guardando tu mano dentro de las mías mientras sentía que el corazón palpitaba lo que ni en ningún maratón pudo agitarse, más si veía como el doctor y enfermera intentaban controlar lo inevitable – lucha, lucha por ti – besé tu mano – por mi – la debilidad surgió en forma de cascadas saladas – no me dejes.

- Si... yo... muero... - intentaste sonreír con tus ojos que perdían su brillo - volvería... por ti. Pero... mientras... eso... pasa... sé feliz... - sacudía la cabeza en negación.

- Aunque lo intentara, no podría sin ti. Toda mi felicidad es gracias a ti.

Se siguen quedando cortas las palabras cuando recuerdo que después de decirte eso, tu sin hablar, me pronunciaste "gracias" y para terminar un "te amo" con tu último aliento que el cruel destino decidió cortarte, encaprichándose en arrebatarme al ser más puro que en mi maldita vida pude amar.

Ha pasado un largo, sofocante y doloroso año desde que te fuiste. Desde que me dejaste sin ti. Ahora estoy aquí hincado dejando frente a la tumba que recita tu nombre en esta fría lápida, las flores que sé que son tus favoritas.

- Quiero se sepas, que te amo eternamente. Que cuando dije "si" a nuestro amor, lo dije para siempre – sonrío con melancolía – a tu lado era todo perfecto. Cada detalle tuyo era el mejor. Me hiciste hacer florar mi lado romántico cuando te conocí, tanto, que lo que antes pensaba que era ridículo, se volvió en pasión. Hasta teníamos nuestra canción – la amargura inundó mi boca - ¿la recuerdas? Yo la escucho siempre.

Me puse de pie para acercarme a la lápida y acolchonarme en él con el propósito de querer seguir platicando.

- Pensaba que le enseñaríamos al mundo lo que era el amor. Rebosaba de ese sentimiento que quería que todos lo sintieran – miro hacia el cielo despejado – que tu y yo podíamos con lo que sea – mis labios se volvieron una línea recta – pero me equivoqué. No pudimos con ese enemigo con el que estuvimos luchando más de un año cuando apareció. Todo... avanzó tan rápido – suspiro con frustración - me he odiado por no protegerte, aunque las personas y doctores me digan que no es mi culpa, que a las enfermedades no les importa si eres malo o bueno, rico o pobre; te escoge por azar, por crueldad.

Antología 'Por siempre'Donde viven las historias. Descúbrelo ahora