O6 ‧₊˚ 「𝐘𝐀𝐍𝐃𝐄𝐑𝐄 𝐌𝐈𝐋𝐈𝐓𝐀𝐑˚ ⚘ ˏ'୭̥!!

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YANDERE OC
yandere militar
esclava de guerra lectora
golpes, humillación, amor forzado
síndrome de Estocolmo
dependiente emocional

yandere manipulador, obsesivo, agresivo.

ㅤ༦ㅤ̊  슧 única ꣒ㅤ⎯̊⛓


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tus manos se veían envueltas en unos grilletes. Intentas moverte para tomar un poco de la agua de lluvia. No recuerdas nada, lo último que tu mente podía procesar es que ya no eras una noble, que aquellos días de comida fina, vestidos lujosos y joyas caras se habían terminado, las veces que tu prometido te llevaba a una cena o a un banquete imperial eran nulas. Tus puños se aprietan fuertemente, los labios los comprimes al lograr alcanzar el bote donde tomabas el agua, callas un sollozo y lo atraes hacia a ti, tomando de este. El sabor de la suciedad y el olor pudrido te hace querer vomitar. Tenías suerte de siquiera seguir viva.

Una lágrima resbala a lo largo de tu mejilla, perdiéndose en tu mentón, e intentas controlar la dolorosa sensación de tus piernas al intentar optar una posición más cómoda. Tus ropas rasgadas, tu débil y sucio cuerpo lleno de moretones y cortadas, la sangre seca y la tierra adherida a tu piel, tus uñas largas con una capa de suciedad notoria. Te retuerces de dolor, y mueves tu cuerpo hasta quedar apoyada contra la pared de bloques grisáceos. Observas tus muñecas y una punzada se propaga através de estas. Estaban al rojo vivo, los delgados hilos de sangre llevaban hasta sus codos .

── mi pequeña flor, no llores ── una mano enguantada viaja a tu mejilla. no te atreves a al azar el rostro por miedo. Notas como aquel hombre sonreía. No tendrías miedo de no ser por que ese hijo de puta era el que peor te trataba. Tus dedos se sostienen de tus lastimadas palmas y muerdes tus belfos, en busca de tranquilizar la terrible ansiedad que aquel hombre de cabellos castaños te causaba. Noto aquel rechazo de tu parte y sostuvo tu mejilla, obligandote a alzar la mirada. ── Escucha bien maldita perra, si te tengo aún con vida es por que me parecías una bonita adquisición, ¿entendido?, el hijo de puta de tu prometido no podrá salvarte esta vez.

Se levanta, no sin antes mirarte con aquellos ojos llenos de amor, pateando algo a tu dirección. Contienes un grito, cubres tu boca con ambas manos mientras comienzas a negar. La aterradora escena que se mostraba frente a tí. Este parecía estar bastante tranquilo y sonreía de forma inmadura. Tiemblas, simplemente la escena era para ti algo que no podía ser cierta. Te remueves y te pegas más hacia la pared, una lágrima tras otra, era la cabeza de tu lindo prometido, aquel que te juro lealtad y cariño eterno, el cual amabas más que a nadie, el cuál sería tu esposo luego de ganar la terrible guerra.

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Tus manos buscan el alimento, sus carcajadas se extienen por toda la habitación. Un miedo irracional comienza a acaparar tu pecho, tus orbes se posan sobre el hombre de cabello castaño, sus orbes dorados te miraban de arriba a abajo. Quedas perpleja y únicamente te orillas a la sucia y cochambrosa pared. Habían sido algunos meses desde tu cautiverio, y lo único que habías sentido hasta el momento era un odio y terror los cuales se extendían por cada célula al verlo, al sentir su cuerpo cerca del tuyo. Cuando se acerca un poco más a ti el miedo retenido escapa en lágrimas, esperabas un golpe, una patada como comúnmente recibias de él. Sus manos al tocar delicadamente tu rostro te hacen sentir asco, querías escupirle a la cara, gritarle, le querías recordar lo mucho qe lo odiabas, pero aún así el miedo fue mayor y dejas que sus manos acaricien tus sucios pómulos.

Así pasaron varios días, en los cuales sus manos se dedicaban a posarse sobre alguna zona de tus hombros o rostro, te alimentaba y comenzaba a comportarse cariñoso, sosteniendo tu mano entre la suya, besando de esta mientras llamaba tu nombre de forma cariñosa. Al principio lo odiabas, querías que su tacto cesara, no confiabas en su agradable voz, ni tampoco confiabas en él. Aún así te comenzaste a acostumbrar a sus brazos, a sus sonrisas, a sus besos y sobre todo a sus románticos jugueteos. No entendías por que tu cuerpo mismo había decidido hacerse suyo, por que tu mente rogaba sus brazos y por que tus labios correspondían los atrevidos besos que te robaba de vez en cuando.

Habías pasado un año tal vez en ese horroroso lugar, no sabias cuanto tiempo habías tardado en caer a sus pies, en besarlo cariñosamente y abrazarlo cual esposa abraza a su marido, en dejar besos en su cuello cuando estaba estresado o llorar cuando este tenía que salir de misión para volver en unos días o semanas. Ni siquiera te diste cuenta de cuando los malos tratos, los golpes y las violaciones te dejaron de importar, simplemente lo amabas, estabas cegada por aquel dulce amor, aquel que te producía sentimientos irreconocibles a tu gusto. Suspiras, tus labios se fruncen al encajar la aguja sobre tu dedo. Antes la boca en forma de queja y únicamente te dedicas a suspirar cansadamente. hace algunas semanas tu esposo había salido de la ciudad para ir a calmar a un pueblo furioso, por lo cual, tu, inocentemente le prometiste un bordado hecho a tu mano cuando el volviera. uno sobre su escudo familiar, cabe aclarar.

No sabes cuanto tiempo pasas frente a la aguja, buscando obtener el resultado deseado. Una sonrisa de satisfacción abandona tus labio y asientes. Esperabas que a tu marido le gustara, después de todo tus manos estaban heridas de tanto que te esforzaste. Te levantas y corres a la planta de abajo, con la capa bordada en mano, mientras notas a tu esposo sonreír fríamente . Te acercas lentamente y esperas en la puerta pacientemente a que su mirar dorado sea dirigido a ti. Cuando eso pasa, alzas tu mano, y notas sus orbes brillando, su sonrisa se notaba. Se acerca a ti y te sostiene por las caderas, alzandote con una sonrisa en los labios. Junta sus frentes y besa tus delicados labios con una pequeña sonrisa. Como te amaba.

── la capa que mi esposa hizo para mi es tan hermosa ──una sonrisa boba se extiende y ocultas su cabeza en su cuello, totalmente avergonzada. Esas suaves y dulces acciones te habían hecho sentir como en casa.

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Abro mis ojos sin saber cuanto había dormido, me apoyo sobre la cama y me pongo de pie, escuchando la cadena sonar tras de mí. Volteo y notó aquella cadena que se envolvía en mi tobillo, cierto... El no me había soltado por miedo a que escapara. Mis ojos cansados se posan sobre otra dirección y un suspiro abandona mis labios, la calidez de mis manos se envuelve sobre la mejilla de mi pareja quien se encontraba dormido. Tonto, jamás te abandonaría, eres mi razón de vivir.

── Pensé que nunca despertarias, dulzura ──la voz de mi esposo sonó en mis oídos. Me rió y junto mi frente sobre la suya. ──tal vez hoy salgamos a dar un paseo al patio.

Mis ojos brillan. Desde que llegue, no había salido ni una vez de esta habitación.

¡ explicación ! : el haber salido de la habitación era un sueño, él la manipuló, la drogo y la violó a través del tiempo que estuvo con ella, seguidamente la amo, la trato bien y la hizo "acostumbrarse" a un trato así de inhumano.

ㅤ༦ㅤ̊  슧 dulzura ꣒ㅤ⎯̊⛓

쉶숑럥

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CORREGIDO Y EDITADO :
2O–O5–2O22
8:4O PM
ZONA HORARIA MÉXICO

𝐃𝐀𝐑𝐊𝐍𝐄𝐒𝐒   ︴ yandere ! one shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora