El chico del boliche || Chifuyu Matsuno.

Capítulo Siete.

Tus piernas ya casi no daban para más, no sabías cómo podías seguir moviendote y saltando.

Habías estado dejando todo lo que tenías y sabías en esta cancha.

Y al solo estar a un punto de ganar, ya no dabas más, pero seguías porque querías ganar.

Ustedes habían ganado dos sets y el otro equipo igual, habían perdido el anterior por un descuido y eso llevo a este quinto set, el cual iba 16 - 17 con ustedes ganando.

Estabas al lado de la red junto con Momoi y Yumi preparadas para bloquear la siguiente jugada que haría el equipo contrario.

El silbato sonó y Jun dió un saque que pasó bien al otro lado. Mirabas atentamente como el balón era recibido y pasado hacia la armadora.

Viste como iba a hacer un remate por la derecha, te moviste rápidamente hacía allá junto con Momoi y en cuanto salto la rematadora, también lo hicieron.

Rápidamente y con habilidad moviste tus manos con velocidad, bloqueando el balón. La libero del otro equipo intento alcanzarla antes de que toque el suelo, pero ya lo había hecho.

Y en cuanto sonó el silbato, no evitaste festejar el punto con fuerza, habían ganado y la emocion estaba recorriendo tu cuerpo.

Viste a tus compañeras, entrenador y a las gradas festejar.

Suspiraste sacando todo el peso y nervios que habías sentido.

Momoi a tu lado aún estaba sin aliento, teniendo sus manos apoyadas en sus muslos.

Lentamente te dejaste caer de rodillas, masajeaste tus muslos, te dolían y ardían mucho, sin contar tus brazos, los cuales pesaban bastante.

Oíste como tú amiga hizo lo mismo y la miraste, ambas sin aliento.
Alzaste tu mano en forma de puño y se la extendiste, ella al verla no dudo en hacer lo mismo y chocarla.

—¿Lo logramos, eh?— pregunto divertida y no evitaste reír.

—si, lo hicimos— ella extendió su sonrisa y viste como sus se estaban aguando.

Ambas sintieron unos brazos abrazandolas por el cuello y pudieron ver a Akane lagrimeando en medio de ambas.

—ustedes dos casi me dan un infarto— dió un pequeño sollozo.

El anterior punto antes de este, casi fue para el otro equipo. Eso porque habían hecho un toque pero la pelota se había desviado.

Momoi había ido corriendo para agarrarla, pero a la mitad de eso te había mirado de reojo y gracias a todas las veces que jugaron juntas ya sea de prácticas o no, sabías lo que significaba.

Así que no dudaste en correr detrás de ella, la chica llegó a golpear la pelota pero solo la elevó no fue a ninguna dirección.
Ahí apareciste aún que para llegar tuviste que estirarte de más y la golpeaste bien alto y en dirección cerca de la red.
Ella te agarro antes que te caigas y ambas vieron como Anna remataba el balón que ambas salvaron y hacia un punto para ustedes.

—estoy tan orgullosa de ustedes— volvió a sollozar.

—y nosotras de ti— respondiste acariciando su espalda.

Ella se separó y las ayudo a levantarse, en cuanto lo hicieron, viste como Jun abrazaba con fuerza a Momoi, sonreiste.

Miraste a Anna y te acercaste a ella. Aunque intentaba disimularlo pestañeando varias veces, la viste lagrimear.

—tu idiota— te dió un pequeño golpe en el brazo. —me asustaste— te murmuró bastante bajito.

Sabías que estaba hablando de la vez que te chocaste con los anuncios de los costados de la cancha para salvar un balón.