Capítulo Dieciséis.

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Tenías los anillos en mano, los mirabas analizandolos una vez más.

No eran la gran cosa, eran plateados, lisos y muy normales. Solamente tenían una pequeña piedrita celeste en el medio y lo especial, estaba en la parte de adentro.

Habías hecho que grabarán algo que les gustaba a ambos y lo primero que se te ocurrió, fue el amor que le tenían a los gatos. Así que, lo que estaba grabado, era la carita de un gatito.

Los guardaste con cuidado a ambos en la cajita, te pondrías el tuyo cuando ya se lo hubieras entregado.

Además de eso, habías buscado por muchas tiendas de mangas y esperabas que realmente valga la pena, pero le habías conseguido el fanbook de Nana, además de que uno que otro manga del mismo anime. No ibas a negar que habías aprovechado de que había promoción.

Sabías lo fan que era Chifuyu de aquel anime y manga, así que, queriendo que él tuviera su momento "medias de abejita", quisiste darle ese detalle.

[...]

El chico no había planeado algo grande, lo primero que había pensado era algo tipo picnic, pero debido a que estaba casi nevando esa idea se descartó enseguida.

Así que aprovechando que la navidad se acercaba, preparo una merienda dónde dijo que si querían traigan cosas dulces o saladas para comer porque su madre haría chocolatada casera y que si no querían, también prepararía té.

Ese día, puntualmente a las 00 en punto.
Le habías mandado muchos mensajes felicitándolo y como no, nunca podría faltar la historia en Instagram dónde lo felicitabas también.

Habías subido una que tenía tan solo cuatro fotos, una de su primera cita, la otra de la vez que te pidió ser su novia la cual salía ustedes dos juntos y el vino con la nota, otra que estaba media borrosa porque la habían sacado mientras que los dos estaban en pedo y la última de cuando te habías quedado a dormir a su casa y aparecía Peke.J entre ustedes.
Con un pequeño texto diciendo: "feliz cumple a mi lindo chico<3." Y etiquetandolo junto a un corazón.

Él te respondió enseguida, parecía muy contento y emocionado. Además de agradecerte y decir lo tanto que te quería, te contó que varios de sus amigos lo felicitaron y eso lo ponía muy feliz.
Sonreiste mientras leías sus mensajes, te llenaba verlo feliz.

[...]

Habías llegado mucho más temprano, todos los invitados iban a llegar a eso de las cuatro o cinco de la tarde, pero recién era medio día y ya habías llegado.

Primero, era porque tenías muchas ganas de abrazar al chico y felicitarlo en persona y segundo, porque ya habías quedado con su madre para ayudar en lo que puedas.

Tocaste el timbre, llevabas tu bolso colgando en tu hombro dónde tenías el brownie que habías cocinado para hoy y en mano la bolsita de regalo para él, aunque la cajita con los anillos estaba en tu bolso.
Tenías planeado otra cosa para dárselo.

Esperaste pacientemente, hasta que la puerta se abrió dejando ver a cierto rubio un poco despeinado junto a un moño en su flequillo, señal de que estaba cocinando.

—t...?— antes de que pudiera decir tu nombre, te habías abalanzado para poder abrazarlo con mucha fuerza.

—Feliz cumpleaños, amor.— le dijiste mientras que aún lo abrazabas, él soltó una pequeña risa y le besaste la mejilla con rapidez.

—Gracias, linda— te respondió, sonando contento y devolviéndole el abrazo de inmediato.

Cuando levantaste tu cabeza para mirarlo, él estaba con una sonrisa dulce y con sus expresiones que reflejaba que estaba muy feliz. Y no pudiste evitar sonreír muy contenta.

El chico del boliche || Chifuyu Matsuno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora